Acusación
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Acusación
- Año
- 1325 d.É
- Argumento
- Historia personal
- Capítulo
- Sombras del pasado
- Localización
- La Ciudad Alta
(Linde de la Divinidad)
Rurikton
(Linde de la Divinidad)
Colinas de Delania
(Colinas Kessex) - Nivel
- 20
- Raza
Humano- Elección
- Hermana muerta
- Precedido por
En busca de la ayuda de Logan Enfrentarse al capitán Tervelan- Seguido por
- Liberación
|
Pantalla de carga |
Acusación es parte de la historia personal para los personajes humanos que han escogido no haber recuperado el cuerpo de su hermana.
Objetivos[editar]
El ministro Arton ha traicionado a los Serafines.
- Avisa a la reina Jennah.
- Habla con Logan Thackeray.
El sargento Hal está destinado en Rurikton.
- Busca al sargento Hal.
Visita el Refugio Negro y habla con Dansky.
- Ve al Refugio Negro para buscar al guardia del león Dansky.
- Detén el ataque de los bandidos en el Refugio Negro.
- Detén el ataque de mortero.
- Habla con el guardia del león Dansky en el muro.
Recompensas[editar]
Clic aquí para editar los datos de recompensa
- Todas las profesiones
- 2808
Kit de reciclaje básico
Saco de botín (4)
- Profesión específica
Uno de los siguientes: Espinilleras de cadenas malignas, Espinilleras de cadenas poderosas, Espinilleras de cadenas resistentes
Uno de los siguientes: Pantalones de buscador malignos, Pantalones de buscador poderosos, Pantalones de buscador resistentes
Uno de los siguientes: Pantalones bordados malignos, Pantalones bordados poderosos, Pantalones bordados resistentes
Guía[editar]
Dirígete a La Ciudad Alta en Linde de la Divinidad para avisar a la Reina Jennah. Entonces habla Thackeray, y ve al mundo abierto para hablar con el Sargento Hal en Rurikton.
Ve al Refugio Negro y defiéndelo del ataque de bandidos. Hay 8 bandidos que atacan directamente la puerta, y bandidos cañoneros que maniobran los cañones. Derrótalos a todos y habla con la Guardia del león Dansky.
PNJs[editar]
Aliados[editar]
La Ciudad Alta[editar]
Rurikton[editar]
- Humanos
Colinas de Delania[editar]
- Humanos
- Varios (Guardia del león)
Enemigos[editar]
Colinas de Delania[editar]
Objetos[editar]
- Colinas de Delania
Diálogo[editar]
La Ciudad Alta[editar]
Cinemática con Jennah:
- Logan Thackeray: Lamento interrumpir, majestad, pero esto no puede esperar. Hay un traidor en el Ministerio.
- Reina Jennah: Es una acusación muy grave, Capitán. Ya conoces la ley. ¿Puedes aportar pruebas que sustenten esa acusación?
- <Nombre del personaje>: Estamos trabajando en ello, majestad. El capitán Tervelan ha confesado que un ministro le ordenó desvelar las rutas de patrulla al enemigo. Los Halcones aulladores murieron por ello.
- Ministro Arton: ¡Imposible! Un ministro nunca traicionaría a sus soldados. Quiero que se investigue este asunto de inmediato, su majestad. El honor del Ministerio está en juego.
- Ministro Arton: La orden del capitán Tervelan corresponde a mi jurisdicción ministerial. Yo soy quien trabaja con él mano a mano. Yo soy el impugnado.
- Ministro Arton: No soy culpable de esos delitos, su majestad. Te soy leal a ti y a Kryta. Como prueba de fe, me entrego por completo a tu disposición.
- Reina Jennah: Gracias, Arton. La Hoja Brillante te pondrá bajo custodia y estarás bajo arresto mientras llegamos al fondo de este asunto.
- Condesa Anise: Logan, recuerdo que uno de los serafines fue trasladado de la compañía de Tervelan justo después de que los Halcones cayeran en una emboscada... El sargento Hal. Puede que sepa algo.
- Logan Thackeray: ¿Hal? Si mal no recuerdo, patrulla el margen oriental de Linde de la Divinidad. Héroe, ¿por qué no vas a averiguar lo que sabe? Yo protegeré a la reina.
Hablando con Logan:
- Logan Thackeray: A lo mejor Hal dejó la unidad de Tervelan porque descubrió lo que hizo éste. Ve a ver lo que te puede contar sobre la desaparición de los Halcones.
Si sabe algo, lo haré hablar.
- Bien. Quiero asegurarme de que Jennah está bien, así que te quedas solo. Encuentra a Hal en el margen oriental de Linde de la Divinidad y averigua qué sabe.
- Ma pasaré por aquí pronto.
Hablando con los PNJs:
- Reina Jennah: Arton sirvió como ministro a mi padre, el Rey. Siempre ha apoyado mi reinado. ¿Puede haber estado conspirando contra mí?
El capitán Thackeray y la condesa Anise se encargarán de esto.
- Gracias, Héroe. Me alegra saber que este asunto está en buenas manos.
Estaréis a salvo, Majestad. Mientras, yo averiguaré la verdad. Lo juro.
El capitán Tervelan nos convenció que estaba en contacto con el ministro Arton, Majestad.
- Averigua cuanto puedas. Esto es muy preocupante.
- Así lo haré, Majestad.
- Majestad, lo haré lo mejor posible.
- Condesa Anise: ¿Acusas a un ministro delante de la reina? Sabía que eras audaz, pero no tan osado.
- No es osadía. Es determinación. Ese traidor no se saldrá con la suya.
- Ministro Caudecus: Estás armando un buen jaleo con esas acusaciones. Espero que encuentres las pruebas que lo justifiquen.
- Lo haré, ministro, estoy deseando presentárselos a la reina.
- Logan Thackeray: Deberías irte. Hal patrulla el margen oriental de Linde de la Divinidad. Estaré preparado por si necesitas ayuda.
- Voy para allá.
Rurikton[editar]
Cinemática con el Sargento Hal:
- <Nombre del personaje>: ¿Sargento Hal? Necesito hablar contigo acerca del capitán Tervelan.
- Sargento Hal: Grenth tenga piedad. Sabía que este día llegaría. ¿Te ha enviado Tervelan para matarme?
- <Nombre del personaje>: No, cálmate. Me envía el capitán Thackeray. Pero dime: ¿por qué querría matarte Tervelan?
- Sargento Hal: Entregué mensajes privados de Tervelan al Ministerio y... al bosque. No pregunté para quién eran las notas pero... dioses, lo sabía. Lo dejé en cuanto pude. Tienes que creerme.
- <Nombre del personaje>: Conque así es como Tervelan se comunicaba con los centauros... ¿Quién era su contacto en el Ministerio?
- Sargento Hal: No lo sé, pero quizá Dansky lo sepa. Era un Halcón antes de pasarse a la Guardia del León. Le han destinado al Refugio Negro ahora.
Colinas de Delania[editar]
Cuando los bandidos atacan el Refugio Negro:
- Guardia del león: ¡Vienen problemas!
- Guardia del león: Este aceite debería ahuyentar a los bandidos de la puerta.
- Guardia del león: Deberíamos destruir esos morteros con fuego de cañón. Yo tengo una puntería malísima, ¡hazlo tú!
- Guardia del león: ¡En guardia! ¡Se han abierto paso!
Al acercarte a los cañones:
- Cañonero bandido: Voy lo más rápido que puedo. ¿O quieres que te explote en las narices?
- Cañonero bandido: Mejor eso que un héroe venga y lo estropee mientras tú estás de cháchara.
Hablando con Dansky:
- Guardia del león Danksy: Ahora no tengo tiempo para charlar contigo.
Más te vale. Podrías afrontar un juicio por traición.
- ¡Traición! ¿Qué he hecho?
Háblame de cómo era servir bajo el mando del capitán Tervelan. ¿Sabías que traicionó a la Compañía del Halcón?
- ¡Me limitaba a cumplir órdenes! ¡No sabía nada de ninguna traición! Solo llevaba mensajes.
- Mensajes que ponían en peligro a los Serafines. Mensajes que hicieron que sus rutas de patrulla cayeran en manos de los centauros.
- Oh, Dwayna. Juro que no lo sabía. Mira, a veces los centauros venden prisioneros a esclavistas, normalmente bandidos humanos. Un grupo de estos opera desde un campamento al este.
- Le echaré un vistazo. Ahora desaparece de mi vista.
- ¿Un mensaje? Es todo lo que necesitaba saber.
- Si no lo sabes, es probable que no puedas ayudarnos.
- Tu ayuda podría aclarar un asunto legal de gran relevancia.
- ¿Un asunto legal? En tal caso, haré lo que pueda para ayudar.
- Háblame de cómo era servir bajo el mando del capitán Tervelan. ¿Sabías que traicionó a la Compañía del Halcón?
- Tervelan es un tipo horrible y un matón. Estar a sus órdenes no fue fácil. Preguntar algo era sinónimo de someterse a disciplina física. Sabíamos mantener el pico cerrado.
- ¿Es posible que parte de la Compañía del Halcón siga con vida?
- Si los centauros los capturaron, los venderían a los esclavistas humanos. Hay un campamento de bandidos al este de aquí. Se dedican al tráfico de esclavos. Quizá podrías ir a echar un vistazo...
- Gracias por la ayuda.
- Ya veo. Eso es todo lo que quería saber.
- No importa. No creo que puedas ayudar.
- Por favor... Nos serías de gran ayuda.
- Suena importante. Me encantaría colaborar. ¿Qué necesitas?
- Háblame de cómo era servir bajo el mando del capitán Tervelan. ¿Sabías que traicionó a la Compañía del Halcón? (igual que la opción de dignidad)
- No te preocupes, no tengo preguntas que hacerte.
- Necesito que contestes unas preguntas.
- Supongo. Si es importante... ¿Qué necesitas?
- Háblame de cómo era servir bajo el mando del capitán Tervelan. ¿Sabías que traicionó a la Compañía del Halcón? (igual que la opción de dignidad)
- No te preocupes, no tengo preguntas que hacerte.
- Entonces no te molestaré.
Cinemática tras el ataque en el Refugio Negro:
- Guardia del león Dansky: Esos bandidos nos pillaron con la guardia baja, pero no robaron nada. Parecía que solo querían matar.
- <Nombre del personaje>: Sospecho que vinieron para matarte, Dansky. Tengo que hablar contigo. Estoy investigando acusaciones de traición relacionadas con la caída de la Compañía del Halcón.
- Guardia del león Dansky: No tienes ni idea de lo que me alegra oír eso. Siempre sospeché que Tervelan no era trigo limpio, pero no tenía pruebas.
- Guardia del león Dansky: La Compañía del Halcón es la mejor unidad en la que he servido. Si no hubiese estado convaleciente, ese día habría estado con ellos.
- <Nombre del personaje>: Tienes que saber algo. Dime, ¿alguna vez has visto a Tervelan reunirse con un ministro?
- Guardia del león Dansky: No. Mi trabajo era llevar mensajes de los Serafines. Los que traje a Tervelan iban dirigidos al "ministro Arton", pero sé a ciencia cierta que Arton nunca recibió esas cartas.
- Guardia del león Dansky: Tras la caída de la Compañía del Halcón, averigüé que el tipo al que se las llevaba ni siquiera trabajaba en la oficina de Arton. Nadie lo había visto nunca.
- Guardia del león Dansky: También le llevé a ese tipo la última ruta de patrulla de la Compañía del Halcón. Tras el ataque a la unidad, lo analicé... y no pude permanecer en los Serafines.
- <Nombre del personaje>: ¿Conoces la ruta que iban a patrullar?
- Guardia del león Dansky: Claro. Se suponía que tenían que cruzar la Colinas Kessex. Aquí, lo marcaré en tu mapa.
Mi historia[editar]
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