Usuario:Stéphane Lo Presti/News/2019-03-19/LWS4SummarySpanish
Preludio: La sombra del Rey Loco
Durante el regreso del Rey Loco Thorn tras la muerte de Balthazar, tuvieron lugar dos extraños sucesos al mismo tiempo que la aparición de nuevos cortesanos lunáticos: se vieron a los Despertados de Palawa Joko en pequeños grupos por la costa del Mar de los Pesares y el Mar de Fango. Según el general de brigada Grano, Joko envió a estas fuerzas como represalia después de que "alguien causara" problemas en Elona, aunque Grano también señaló que Joko se negaba a enviar al grueso de su ejército en ese ataque.
Con el final de los tiempos del Rey Loco, empezaron a aparecer esqueletos misteriosos en lugares cercanos al Inframundo, y varios sacerdotes de Grenth habían oído gritos de una dama roja que los traía allí. Se hallaron a todos esos sacerdotes muertos a causa de poderes nigrománticos y heridas de hacha.
Episodio 1: Amanecer
Kralkatorrik anda suelto y Aurene ha desaparecido; pero, antes de que puedas ponerte manos a la obra con los dragones, Amnoon necesita tu ayuda.
Al poco de la derrota de Balthazar y la celebración posterior, el comandante se encontró con Taimi y Rytlock en un pequeño rancho de dolyaks cerca de Amnoon. Tras "tomar prestado" parte del ejército despertado de Joko para combatir a Balthazar, el comandante trató de no acercarse a las ciudades elonianas. Marjory y Kasmeer se habían marchado para vigilar las acciones de Kralkatorrik, pero este tan solo había permanecido sentado en un barranco desde su combate con el dios caído. No obstante, la conversación se vio interrumpida por una tormenta de la Marca que apareció sobre Amnoon, a pesar de la ausencia de Kralkatorrik. Rytlock y el comandante se dirigieron deprisa a Amnoon para ayudar a todos los ciudadanos posibles y acabar con tantos marcados como pudieran. Llegaron demasiado tarde para salvar a varios ciudadanos, incluyendo al subalguacil Qais. Después de que pasara la tormenta de la Marca, Aurene, que ya era una dragona adolescente, aterrizó y dio a los aliados reunidos una visión de una ciudad lejana y de un enorme ejército de despertados. El agente Kito señaló que la ciudad parecía ser Fahranur, la Primera Ciudad, la cual se encontraba en Istan. El comandante se dirigió a los muelles y se subió a un barco para partir hacia la isla sureña.
Una vez en Istan, el comandante se dirigió al Observatorio en busca de lanceros del sol aliados. El Observatorio es un santuario de conocimiento que contiene libros de una época anterior a Joko y sus historias revisionistas, pero recibe regularmente el asalto de tropas despertadas que buscan interrumpir sus estudios y hacer desaparecer toda la literatura. Tras demostrar que no tenía ninguna amistad con Joko, permitieron al comandante entrar en la base secreta bajo el Observatorio, que solo era accesible a través de cierto libro que abría un portal. Por desgracia, los Lanceros del Sol no pudieron ayudar, ya que su líder, el mariscal lancero Zaeim, se encontraba fuera, intentando liberar Amanecer del Campeón del control de los Despertados. En Amanecer del Campeón, dos sacerdotes informaron al comandante de que Zaeim había sido capturado por corsarios. No obstante, una de los antiguos líderes de dichos corsarios, Margrid la Ladina, había perdido una vieja moneda. Si se le devolvía a la líder Sayida la Ladina, tal vez se conseguiría obtener un favor de ella. La guardaba en una cueva al sur de la ciudad un soldado despertado particularmente rebelde, uno que siempre había sido bueno con los niños de la aldea.
El comandante derrotó al lancero del sol despertado campeón y se dirigió al campamento de corsarios moneda en mano. Allí, el comandante se encontró con el mismo hombre que había organizado el viaje hacia Istan en Amnoon, quien le advirtió sobre la recompensa que daban por su cabeza. El comandante solicitó parlamentar con la tripulación para conocer a la capitana. Sayida estaba deseando entregar al comandante para obtener la recompensa, pero reconsideró tras ver la moneda. Por desgracia, Sayida ya había entregado a Zaeim a cambio de la recompensa hacía menos de una hora. No obstante, ella tenía un plan para entregar también al comandante, pero no antes de preparar un grog especial con ingredientes que se encontraban alrededor de la zona. Apareció el agente Kito, que prometió ayudar en el plan junto a Sayida. El comandante accedió, diciendo que la recompensa serviría como pago por adelantado y que entregaría la moneda solo cuando él escapara.
El agente Kito y sus tropas no se encontraban en la sala del Creciente Acerado, mientras que los hombres de Sayida tenían problemas para levantar los barriles de grog, así que ejecutaron el plan sin la Orden de las Sombras. Justo cuando estaban entregando al comandante, Taimi le llamó a través del comunicador. El Guarda de la sala dejó inconsciente al comandante y le puso en una celda al lado del mariscal lancero Zaeim. Después de que el guarda perdiera el conocimiento, el comandante logró escapar de la celda y liberar a Zaeim. Los dos consiguieron escabullirse de todos los guardias despertados y llegar a una estantería oculta. El Guarda tenía el comunicador y Taimi no dejaba de llamarlo. Estaba claro que algo la asustaba. Con la ayuda de Sayida y sus hombres, el Guarda fue abatido. El comandante descubrió que Taimi había sido secuestrada por Joko, que había conseguido escapar del Inframundo y pensaba usarla para vengarse.
Unos reclutas de los Lanceros del Sol ayudaron al comandante y a Zaeim a escapar del complejo y dirigirse a la Primera Ciudad. Rytlock y Canach se les unirían poco después. La antigua ciudad tenía un montón de peligros, desde los animales hasta los soldados despertados, e incluso viejas trampas que servían de pruebas. Consiguieron superar algunos con la ayuda de sus monturas, e incluso siervos marcados lucharon contra los Despertados para ayudar al pequeño grupo a llegar a su destino. Después de un tiempo, encontraron unos cadáveres asura vestidos con atavíos de la Inquisa. Al parecer, habían construido un laboratorio en alguna parte de Fahranur, a pesar de que se creía de que todos los asura habían sido expulsados hacía mucho tiempo. En cuanto Canach intentó colocar un explosivo para atravesar un muro de huesos, los cadáveres de la Inquisa se levantaron y se convirtieron en siervos despertados, a los que después les siguió un enorme cánido despertado. Tras una larga batalla, las bombas de Canach estallaron, pero provocaron una avalancha. Por suerte, Braham protegió al comandante y a sus amigos. Rox y él habían estado investigando las olas de muertos vivientes que habían empezado a atacar Tyria, llegando a través de portales asura que no tenían puerta al otro lado.
Tras reunirse con sus viejos amigos, Guardia de la Eternidad y sus aliados destruyeron las puertas de la Inquisa y continuaron su camino a la ciudad antigua hasta que llegaron al centro de puertas, el cual estaba guardado por un muro asura. Una grabación de seguridad confirmó que tanto Taimi como Joko habían estado allí, y que Taimi había ayudado a regañadientes a abrir la puerta bajo amenaza de convertirse en una despertada. No obstante, tan pronto se abrió la puerta, una gran oleada de despertados asaltó al equipo. Solo el comandante y Braham continuaron hacia la plataforma central, donde Taimi se encontraba presa dentro de su gólem. Los miembros de la Inquisa despertados informaron al comandante de que les había declarado la guerra a ellos y a sus aliados. Pulgoso 2.0 empezó entonces a atacar por su cuenta al mismo tiempo que succionaba el aire del interior de la cabina del piloto. El comandante y Braham consiguieron salvar a Taimi y destruir todas las puertas de la sala al mismo tiempo. No obstante, la investigación desconocida de la Inquisa y la amenaza de Joko se cernían sobre ellos como una oscura sombra.
Fractal del Oasis del Crepúsculo
Dessa ha desbloqueado un fractal centrándose en la conquista de Palawa Joko de la región de Elona. Jugáis desde la perspectiva del recientemente fundado Creciente Acerado, con vuestro personaje adoptando la forma de un humano eloniano que solía ser lancero del sol. Participáis en el asalto a una aldea defendida por lanceros del sol. Los Lanceros del Sol están liderados por la guarda Amala. Tras la confrontación inicial, Amala "mata" al grupo. Los jugadores son revividos entonces como despertados fortalecidos. Los jugadores dan caza a los arrojarenas restantes que protegen el templo de la aldea. Los jugadores y los siervos de Joko lanzan un ataque conjunto contra los Lanceros del Sol que quedan en el templo. Consiguen derrotar a Amala. Joko le pide a Amala que se una a él. Ella se niega, tras lo cual, él la mata y la despierta. Entonces le ordena que mate a sus antiguos aliado y a los siervos restantes. Los jugadores pueden volver a encontrarse con ella línea temporal normal en la historia de la 4.ª temporada del mundo viviente y al atacar el gran salón del Creciente Acerado.
Sala de las Cadenas
Al investigar la muerte de los sacerdotes de Grenth, la erudita Glenna descubrió en la Puerta del Segador un nuevo portal abierto recientemente que llevaba al Inframundo. Al entrar, ella y un grupo de asaltantes habían descubierto que los Páramos de Hielo estaban siendo asediados por el mismísimo Dhuum. La dama roja que había llamado a los sacerdotes mortales era Desmina, quien dirigía las defensas contra el antiguo dios de la muerte. Se encontraron a más sacerdotes muertos en el Inframundo, los cuales habían conseguido también atravesar los portales, pero no pudieron hacer frente a los siervos de Dhuum.
Habían separado a Desmina de su cuerpo cuando la encontraron, el cual estaba ahora bajo el control de las fuerzas de Dhuum para atacar a aquellos que ella había luchado por proteger. Con la ayuda del asaltante, Desmina había conseguido recuperar sus cuerpo y llevarlos a la Sala del Juicio, así como dirigirlos para acabar con cuatro de los mayores siervos de Dhuum en la zona para dar poder a tres estatuas de Grenth. Entre esos siervos jefe se encontraba el rey Frozenwind, otro leal sirviente de Grenth que había sido corrompido para obligarlo a servir a Dhuum. Con las tres estatuas activadas, Desmina fue capaz de romper la barrera alrededor de la Sala del Juicio y convocar la ayuda de los Siete Segadores. Los asaltantes, segadores y Desmina intentaron entonces realizar un antiguo ritual para volver a encerrar a Dhuum, aunque Desmina había modificado el ritual sin que los segadores lo supieran, sacrificándoles y haciendo que los asaltantes ocuparan su lugar. Con el ritual alterado finalizado, Desmina estaba convencida de que Dhuum había sido encerrado para siempre, y dio a entender que ella dominaría el Inframundo manteniéndose fiel a Grenth.
Historia paralela: Amenaza despertada
Con las puertas asura de Fahranur activadas, Palawa Joko empezó a mandar a sus tropas para invadir Tyria Central. La amenaza debería haber terminado con la rápida destrucción del laboratorio de Fahranur, pero siguieron apareciendo y abriéndose portales en las afueras de las seis ciudades más grandes de la región, de los cuales llegaban despertados. Con la ayuda del comandante y otros aventureros, las fuerzas locales consiguieron rechazar a las fuerzas invasoras. Algunas personas famosas estuvieron presentes para defender sus hogares, incluyendo a Sigfast y Skarti Knutsson, la ejemplar Kerida, el capitán Magnus Manos Sangrientas, la Escuadra Máquina, Ridhais y el pacificador Ninn.
Una vez frustradas las primeras invasiones, el pacificador Ninn solicitó la ayuda del comandante del Pacto para crear un dispositivo que rastreara las invasiones. Haciendo uso de un sintonizador de resonancia, un tanque etérico y un alquímetro de puerta, Ninn y el comandante crearon un lector de distorsiones fásicas capaz de predecir la ubicación de los portales. El comandante guardó el prototipo mientras Ninn mandó los planos a los pacificadores para que los fabricaran en masa.
Episodio 2: Un error en el sistema
Un científico de las misteriosas instalaciones de la Inquisa que reciben el nombre de Rata Primus parece ser la clave para detener la vengativa invasión de Palawa Joko contra Tyria, pero infiltrarse en la fortaleza enemiga será todo un reto.
Kito envió una carta al comandante con noticias de una posible pista. Taimi confirmó la susodicha y encontró a un científico de la Inquisa que podría averiguar el objetivo de Joko. El comandante se dirigió al Charco del Elemento Vital para encontrarse con Kito, mientras que Rox y Braham se unirían a ellos poco después. Al parecer había una base de la Inquisa oculta tras una catarata, y el comandante tendría que interceptar un gólem recolector de especímenes para poder infiltrarse en ella y encontrar al científico Blish, a quien Taimi conoció en el instituto. Rox y Braham se hicieron pasar por especímenes, por lo que tuvieron que pasar por un proceso de limpieza y eliminación de piojos mientras el comandante se infiltraba evitando a los drones de la Inquisa para que no alertaran a los centinelas. Al final del laboratorio, un gran directorio asociado con una puerta asura reveló que Blish se encontraba en Rata Primus. No se podía abrir un portal directamente dentro de Rata Primus, sino en un laboratorio cercano.
Una vez dentro de dicho laboratorio, el comandante, Rox y Braham se dejaron de sutilezas y empezaron a inspeccionar sistemáticamente el laboratorio en busca de indicios del hermano. Gorrik, el hermano menor de Blish, había enviado un mensaje de socorro diciendo que los Despertados estaban atacando Rata Primus. En el camino, el grupo se encontró con una charr con la que la Inquisa había estado experimentando. Más tarde se supo que se llamaba Boticca, y que era de una aldea cercana. Su clan se hacía llamar los Olmakhan, un grupo que se separó de los charr poco después de que Kalla dirigiera la rebelión contra la Legión de la Llama. Los Olmakhan vivían de un modo muy distinto al de los charr de la Ciudadela Negra; preferían la paz, criar a sus hijos en familias en vez de en fahrars, y se especializaban en magia de la naturaleza y efigies de arena. Poco después de que Boticca regresara a la aldea, la Inquisa inició un asalto. El comandante y Braham se centraron en proteger a un grupo de crías que se encontraban lejos de la aldea principal antes de unirse a la lucha en la cámara de los ancianos de la aldea. Un gólem enorme mató al anciano Narn.
Tras evaluar la situación en las Islas Arenosas, el comandante se fue a explorar en los alrededores de Rata Primus mientras que Braham y Rox ayudaban a vigilar la aldea. Un breve encuentro con Aurene ofreció una vista aérea alrededor del enorme cubo, e incluso de una antena de comunicaciones. Un panel en uno de los laboratorios secundarios tenía una grabación del mensaje de emergencia de Gorrik sobre los Despertados y cómo estaban ambos atrapados dentro. El comandante pidió a Taimi que llamara a Sayida para que trajera su aeronave para asaltar el cubo; Taimi intentó unirse a la fiesta. No obstante, algunos de los laboratorios de los alrededores estaban creando un escudo protector que impedía que Sayida pudiera acercarse. Tras sabotear los tres laboratorios, todo estaba listo para entrar en Rata Primus.
Rox y los soldados olmakhan dirigieron un asalto terrestre de distracción sobre Rata Primus mientras que el comandante y Braham realizaban un ataque desde la aeronave de Sayida. Boticca y otros cuatro invocatormentas ayudaron invocando una tormenta que acabó con las torretas defensivas. El interior del laboratorio era un caos. Solo quedaban los gólems y se comportaban de manera errática. Tras explorar tres laboratorios y obtener códigos de seguridad, el comandante descubrió que Gorrik probablemente había saboteado una puerta asura para ralentizar el progreso de Joko, y se encerró en su laboratorio con Blish para protegerse. Más abajo, los Despertados habían empezado a entrar en el complejo, incluyendo algunos despertados de la Inquisa. Al llegar a su laboratorio, encontraron a Gorrik a salvo junto con su hermano. Pero este se había convertido ahora en un gólem. El comandante y Braham decidieron no decírselo a Taimi por el momento, creyendo que era mejor que ella descubriera la verdad en persona. Pero la reunión fue corta, ya que Joko consiguió adentrarse en un laboratorio de alta seguridad y robar toda la investigación que había realizado la Inquisa sobre la plaga de escarabajos (la cual fue más bien una peste). El comandante logró alcanzar a Joko en el centro de puertas. Al parecer, Joko había cambiado sus métodos, y en vez de provocar y torturar al comandante con su fracaso, decidió dejar que la comandante Lonai fuera quien acabase con las molestias antes de que tuvieran la oportunidad de interferir más. Durante la lucha, la puerta asura se activó y succionó a Lonai, Braham y al comandante. La lucha continuó cuando llegaron a Linde de la Divinidad, fuera de la tienda del circo, al Monte Vorágine mientras atacaba un monstruo de lava, y al Estrecho de Gorjaescarcha mientras atacaba la garra de Jormag. Antes de que pudieran matar a Lonai, el portal succionó a los tres una última vez para enviarlos a una roca desolada en medio de un cielo estrellado que, al parecer, estaba lejos de Tyria. Allí, Lonai murió definitivamente en un lugar en el que Joko no podía revivirla de nuevo y los dos se pusieron a reflexionar sobre la vida en esta extraña y desolada roca. Por suerte, Blish restableció contacto y pudo traer a ambos de vuelta a las Islas Arenosas.
Historia paralela: El retorno del despertado
Con la destrucción de la red de puertas de Rata Primus, las invasiones de despertados se ralentizaron muchísimo. Pero para sorpresa de todos, no se detuvieron. El pacificador Ninn solicitó más ayuda al comandante del Pacto para investigar el asunto, sospechando que la destrucción de la red de puertas había causado una avería, y sugirió buscar a los Despertados en otros lugares nuevos. El comandante encontró al final a estos despertados en las islas de la Cala del Sol Austral. Tras investigar rumores e informes de los lugareños, el comandante acabó encontrando los restos de un dispositivo de Rata Primus y se los llevó a Ninn. Tras estudiar los restos durante un día, Ninn completó y archivó un informe de sus hallazgos.
Según su investigación, Ninn llegó a la conclusión de que hubo un cierto número de despertados en tránsito cuando se destruyó el punto de entrada de la red de puertas. Sin punto de entrada o punto de salida estable, todo lo que estaba en tránsito fue eliminado, pero un fenómeno provocó que sus restos quedasen atrapados dentro de un estado intersticial. Esto, en cambio, creó copias fractales de los despertados que estaban en tránsito y murieron, y seguirían apareciendo repetidamente durante varios años hasta que la anomalía se desvaneciera.
Mientras tanto, una sociedad viajera de periodistas de holonoticias apareció en la Cala del Sol Austral, cubriendo las invasiones de los Despertados, así como realizando una encuesta sobre las mascotas favoritas de la gente.
Episodio 3: Larga vida al liche
La plaga de escarabajos amenaza a la Ciudad Libre de Amnoon y los planes de Joko quedan desvelados en su horrendo esplendor. Ponles fin.
Gorrik había realizado algunos experimentos y averiguó que la plaga de escarabajos solo afectaba a los humanos. No obstante, tras hablar de su experimento en público e inyectarse la peste a sí mismo para demostrarlo, le confiscaron todas sus posesiones y le pusieron en cuarentena. Tras las súplicas de Taimi, el comandante apareció en su juicio y declaró en su favor, consiguiendo así que lo liberaran. El comandante, Taimi y Gorrik se dirigieron a los muelles para recuperar todo el equipo de Gorrik, incluyendo a Blish, que había sido desactivado. Cerca del equipo, Lord Faren saludó al comandante, diciendo que Logan, que era ahora mariscal del Pacto, estaba enviando un barco lleno de suministros a Amnoon para ayudar en la recuperación de la ciudad. No obstante, Joko ya había liberado la plaga en el barco. El comandante acabó con la plaga y sus víctimas despertadas, solo para que Joko invitara en tono burlón al comandante a venir a Gandara, la Fortaleza de la Luna, para que contemplara la "segunda parte" de su producción.
Taimi recomendó ir a la Tumba de los Reyes Primigenios para recibir consejo de los antiguos reyes, ya que ellos mismos vivieron la plaga de escarabajos. Tras descubrir que Joko tenía el artículo genuino en sus manos y que estaba listo para liberarlo contra el mundo, Nahlah y Dahlah accedieron a prestar su ejército fantasma a la lucha contra el tirano. También revelaron que podían oler la muerte en el comandante, lo que quería decir que los escarabajos no considerarían como anfitrión aceptable a alguien que ya había estado muerto. Taimi y Blish prepararon un pequeño portal fuera de la tumba de los Primigenios haciendo uso de la tecnología que tomaron de Rata Primus, pero el brazo gólem de Blish se cayó accidentalmente por el portal.
Al otro lado del portal, el comandante usó el brazo cercenado de Blish para ocultarse y acabar sigilosamente con todos los despertados que se encontraban en la ciudad cercana para convertirla en una nueva base en Kourna. Tras explorar un poco más lejos, parecía que las amenazas principales procedían del sur y del oeste, así que Canach se unió al comandante trayendo consigo tanto explosivos portátiles como semillas que crecerían rápidamente para crear un enorme muro de hiedra. Una vez la base quedó asegurada, se mandó al ejército a través de la fisura grupo a grupo. El ejército entero se componía de fantasmas primigenios, charr olmakhan, voluntarios de Amnoon, guerreros lanceros del sol y curanderos sylvari, además de Blish, Gorrik, Taimi, Braham y el comandante.
Habían varias tareas en Kourna que había que completar antes de que el comandante pudiera asaltar la Fortaleza de la Luna. El insecto que Gorrik había estado criando bajo su piel se había convertido en un escarabajo lo bastante grande como para usarse como un nuevo tipo de montura. Una aldea al norte de la base tenía huevos de escarabajo creciendo sobre las cosechas, y hacía falta quemarlos para evitar que se propagaran. Por lo visto, Joko había dado órdenes a uno de sus leales para que propagase la plaga de escarabajos. Al este del campamento, una tribu heket (hyleks elonianos) se ofrecía a ayudar si se les devolvía a sus cazadores para que pudieran alimentarse solos. En el sur, a lo lejos, un barco corsario se estrelló en la costa, pero todavía podía enviar suministros al campamento principal usando catapultas y con el apoyo de no humanos y fantasmas. Después de todo, Lord Faren había conseguido información crucial sobre el frente, algo en lo que se arriesgó a acabar infectado y de salir seriamente herido.
Canach se adelantó para volar por los aires las torres de guardia que había por la entrada principal de Gandara, mientras que el comandante y las tropas se abrían paso por el puente. Canach colocó un explosivo en la puerta mientas que el resto de las tropas luchaban contra los Despertados atacándoles por la retaguardia. Cuando la puerta quedó destruida, las tropas de tercera generación empezaron a adentrarse por la brecha. La brecha de la puerta se quedó trabada brevemente mientras que los fantasmas se preparaban para luchar contra la horda. Mientras tanto, Braham descendió y encontró otra manera de adentrarse en la fortaleza: a través de las alcantarillas. En esa ruta se encontraban varias trampas. Braham encontró un cadáver que era idéntico al comandante, además de unos cuantos otros. No obstante, un anillo de sello reveló que se trataba solo de una ilusión. El comandante tuvo que sortear varias trampas mientras se abría camino hasta llegar al Contaminario. La mariscal de las Bestias Oluwa Eranko protegía la última habitación cerca del final. Aunque le dio las gracias al comandante por la gran victoria contra Balthazar en el gran bazar, Joko le ordenó que lo matara, algo que ella debía obedecer.
Tras la derrota de la Mariscal de las Bestias, el comandante se dirigió al Contaminario, pero acabó cayendo en una trampa. Joko se burló un rato del comandante, pero Braham consiguió sacarle a cambio de acabar atrapado él. Joko continuó riéndose del comandante por necesitar que un amigo se sacrificara por él para poder continuar, tras lo cual se dispuso a luchar. Incluso halagó al comandante, considerándole un rival digno. Tras una larga batalla, la cual incluyó desaparecer durante un rato, invocar a varios protectores, activar trampas y llenar la habitación con la plaga, Joko cayó derrotado al fin. Esto dejó aturdidos a los despertados que se encontraban cerca, ya que eran incapaces de actuar sin las órdenes constantes de Joko. No obstante, esta emoción duró poco, ya que Joko volvió a levantarse y atrapó tanto al comandante como a Braham. Se puso otra vez a recitar monólogos, burlándose del comandante por lo fácil que le resultaba quedarse con la gloria de la victoria obtenida por otra persona y por cómo el mundo celebraría que él acabara por fin con la amenaza. No obstante, en el punto álgido de su discurso, Aurene se abalanzó sobre Joko y devoró su cuerpo. Palawa Joko fue derrotado al fin, lo cual liberó una gran cantidad de energía, pero casi todos los aliados menos Gorrik vieron la escena con repugnancia. A Gorrik solo le interesaban los nuevos especímenes de la plaga.
Episodio 4: Una estrella que nos guía
Palawa Joko se ha ido para siempre, y Elona puede al fin empezar su reconstrucción. Pero cuando una cumbre de líderes en Jahai se ve interrumpida de forma inesperada, Elona se ve metida en el centro de una nueva crisis.
Con su antiguo líder derrotado, Elona tenía 4 grandes grupos interesados en decidir el destino de la región. En la Fortaleza de Jahai tiene lugar una conferencia con los Lanceros del Sol, la Orden de las Sombras, el Creciente Acerado y los Despertados libres del control de Joko que buscaban regir su propio camino. Las conversaciones iban bien hasta que Aurene arruinó la conferencia quedándose dormida en la sala principal. Taimi llamó al comandante, campeón de Aurene, para que viniera a consolarla lo suficiente como para que se marchara de la conferencia. Braham dirigió la marcha al sur, hacia los Acantilados de Jahai, a través de un pasaje secreto. Una vez escoltaron fuera a Aurene, la conferencia se dispuso a continuar hasta que el arconte Iberu realizó un engaño en el que puso a varios miembros del Creciente Acerado bloqueando las salidas de la habitación. Por suerte, Koss apareció y derrotó a Iberu. Entonces tuvo lugar otra interrupción: el Asolador había regresado y empezó a atacar a todos los que se encontraban en los alrededores. El comandante empezó a escoltar fuera a las distintas delegaciones, tras lo cual recorrió toda la fortaleza para rescatar de morir de nuevo o ser marcados a todos los despertados libres que pudo. En el otro lado de la fortaleza, el Asolador voló a través de una gran fisura en la realidad que llevaba a la Niebla. Kralkatorrik estaba ahora en la Niebla y había derribado la aeronave de la general Almorra.
Unas alteraciones por todos los Acantilados de Jahai habían cambiado por completo el paisaje. Había una réplica de la torre de Orr, con una batalla eterna entre orrianos y soldados de la Legión de la Llama; un gran campo que parecía sacado directamente de la Selva de Maguuma, chaks incluidos; y una extraña cueva con champiñones que parecían de otro mundo y que daban visiones extrañas a aquellos que inhalaban demasiado sus esporas. Estas alteraciones estaban relacionadas con Kralkatorrik y con criaturas como los acechadores de la fisura marcados. Una aldea cercana cayó víctima de la Marca unos momentos después de que la conferencia fuese interrumpida, pero Braham consiguió encontrar supervivientes. Habían conseguido esconderse en un establo tallado en roca sólida, lo bastante grueso como para evitar que la Marca accediera al interior. Esto provocó que Koss recordara una ubicación cercana, también bajo tierra, que los Lanceros del Sol solían usar.
Koss y su descendiente lejano, Kossan, llevaron a Braham y al comandante hasta lo profundo del antiguo santuario de los Lanceros del Sol. La mala noticia es que aquel lugar había sido invadido por arañas, pero la buena era que no estaban marcadas, a pesar de que la base se encontraban dentro de la Marca. La llama central se encontraba encendida, lo cual traía luz y seguridad a la cueva, pero las pegajosas telarañas habían evitado que el fuego de Kormir llegara a otros candeleros. Las arañas y la madre de su colonia cayeron tras una cruenta batalla, justo cuando los refugiados empezaron a adentrarse en la cueva. No obstante, una fisura se abrió justo afuera del sitio ahora llamado Refugio del Sol, amenazando a todos los que se encontraban en su interior. El comandante y Braham se dirigieron a luchar contra los invasores marcados, y recibieron pronto la ayuda de Eir Stegalkin, la madre de Braham, y de Snaff, antiguo miembro de Filo del Destino que murió tras la primera lucha contra Kralkatorrik. Habían venido con un mensaje para Aurene: había llegado la hora de que matara a Kralkatorrik y ocupara su lugar como dragón anciano. No obstante, Aurene recibió múltiples visiones de varios aliados luchando con ella contra el dragón anciano en varios lugares. Y aun así, todas acababan igual: con la muerte de Aurene. Asustada, la dragona salió volando y desapareció en el cielo. Muchos refugiados se inquietaron al ver a la dragona aliada escapar volando, pero Blish les aseguró a todos que tenía un plan. Creía que podría fabricar un dispositivo con el que rastrear los movimientos de Kralkatorrik a través de las fisuras; tan solo necesitaba un objeto mágico enorme, como la Espada de Balthazar. Varios miembros del Priorato habían empezado ya la búsqueda y habían calculado una trayectoria de vuelo que la espada podría haber seguido tras la derrota del dios. No obstante, una francotiradora había logrado adelantarse a los exploradores del Priorato y llevársela a un fuerte cercano. El comandante entró en la misma para recuperarla, y se dio cuenta de que la sacerdotisa francotiradora le resultaba familiar, aunque no podía recordar por qué. Al final, la sacerdotisa aceptó su derrota y se lanzó a los pies del comandante, dispuesta a recibir su muerte. No obstante, el comandante mostró una destacable gentileza y le perdonó la vida, ya que solo quería reclamar la espada. Un gesto que llenó de humildad a la sacerdotisa, cuyo nombre era Zafirah. No obstante, Blish se dio cuenta de que la espada parecía haber perdido poder. Le pidieron a Rytlock que usase a Sohothin para rencender la espada, la cual empezó a actuar como si tuviera mente propia. No obstante, ya estaba todo preparado para adentrarse en la Niebla y lanzarle a Kralkatorrik el cebo con lazo y todo.
En la Niebla tenía lugar una cruenta batalla en la que Glint ayudaba a dirigir a los soldados contra los Marcados. Blish empezó a instalar el dispositivo de rastreo en la espada, mientras que el comandante le protegía. Sin embargo, tras varios minutos de trabajo, Blish le dijo al comandante que se marchara, ya que todavía necesitaba realizar unos ajustes finales. Algo que resultó ser mentira. En vez de eso, Blish sacrificó su cuerpo de gólem para servir de fuente de energía para el rastreador. Se despidió del comandante y le pidió a Guardia de la Eternidad que no ocultaran ningún secreto entre ellos. Dijo esto porque Taimi no les había dicho a los demás que su enfermedad había vuelto y que la estaba afectando más que nunca, por lo que pronto le llegaría su fin. Pero en los momentos finales de aflicción, apareció Caithe, quien tenía muchísimas cosas que decirle al comandante.
Táctica del Forjador de Mitos
Zommoros había mandado una invitación inusualmente graciosa para visitar la Forja Mística. Una vez los aventureros respondieron a la llamada, Zommoros presentó un contrato lleno de descargos de responsabilidad para dar su tour. Glenna lo firmó en nombre de los aventureros. Tras adentrarse en la forja, un djinn de fuego llamado Qadim se presentó con un enorme ensamblaje y reveló la verdadera razón por la que se envió la invitación: los aventureros son campeones de Zommoros que se enfrentan a los desafíos de Qadim por el destino de la forja.
Episodio 5: Todo o nada
El comandante y Aurene visitaron la guarida de Glint para completar una serie de pruebas que dejó la propia Glint. El comandante descubrió que Kralkatorrik había visto una visión de un mundo en el que no estaba él. Aurene descubrió que "hay cosas sobre la Ascensión que solo se pueden expresar entre dragones". Después, se dirigieron a los Picos del Trueno para fabricar más armas de sangre de dragón y prepararse para el enfrentamiento final contra Kralkatorrik. Aurene demostró tener la habilidad de marcar, lo cual inquietó a algunos de sus aliados. Como respuesta, Caithe se presentó como voluntaria para ser marcada, lo cual le permitió comunicarse por fin: "Yo no soy él". Por desgracia, la visión de Aurene sobre la batalla resultó ser cierta: murió a manos de Kralkatorrik.