El rescate
El rescate
- Año
- 1325 d.É
- Argumento
- Historia personal
- Capítulo
- La política de Kryta
- Localización
- Villa de Arcillar
(Valle de la Reina) - Nivel
- 10
- Raza
Humano- Elección
- Rata callejera
- Precedido por
De incógnito- Seguido por
- Partiendo filos
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Pantalla de carga |
El rescate es parte de la historia personal para los personajes humanos que han escogido ser una rata callejera y han elegido rescatar a Quinn.
Objetivos[editar]
Salva a Quinn de Pete Dos Filos.
- Viaja hasta el escondite de Quinn en Arcillar.
- Derrota a Dan, el Machacador.
- Escolta a Quinn hasta las puertas de la ciudad.
Recompensas[editar]
Guía[editar]
Encuentras a Quinn en los establos y Dan, el Machacador amenazándolo. Derrota a Dan y despacha las oleadas de bandidos que hay hasta la salida de Arcillar para escoltar a Quinn hasta que esté a salvo.
PNJs[editar]
Aliados[editar]
Enemigos[editar]
- Humanos (Bandidos)
- Asaltante bandido
- Carterista bandido
- Dan, el Machacador
- Explorador bandido
- Fusilero bandido
- Matón bandido
Diálogo[editar]
Acercándote a Quinn y a Dan, el Machacador:
- Quinn: No tenemos por qué luchar. Vamos... vamos a hablarlo.
Cinemática en llegar a Quinn:
- Dan, el Machacador: Se ha acabado el tiempo, Quinn. Ya has cumplido tu propósito, y ahora tengo órdenes de acabar contigo.
- Quinn: ¿Acabar conmigo? Pero Pete... ¡Pete es mi amigo!
- Dan, el Machacador: Solo eres un chivo expiatorio, Quinn. Y ahora vas a ser un chivo expiatorio muerto.
- Dan, el Machacador: Calla quejica, y mantén la calma. Estaba esperando esto.
After defeating Dan, el Machacador:
- Quinn: Ya era hora.
Hablando con Quinn tras derrotar a Dan, el Machacador:
- Quinn: Oh, cielos, esto es malo, muy malo. Dos Filos está poniendo Arcillar patas arriba buscándome. ¡Tenemos que irnos! Si me ven, soy hombre muerto.
Ninguno de los dos saldrá herido, Quinn. Si lo intentan, haré que lo lamenten.
- No sé expresar lo mucho que eso significa para mí. Gracias. Ha... haré lo que pueda por seguir el ritmo.
Mejor será, porque es tu última oportunidad de enmendar tus errores. Vamos.
¿Te acuerdas de cuando le robamos las tartas de moras a la vieja dama Culligan? Estuvo genial.
- ¡Sí! Dejamos a esas pequeñas bolas de pelo y dientes revolcándose en aquella mantequilla pegajosa. Tardó una semana en sacarles la porquería del pelo.
- Exacto. Así que sígueme y todo irá bien.
Tranquilízate. Si queremos salir de esta, tenemos que concentrarnos.
- Tienes razón. Gracias. No sé qué haría si no estuvieras aquí.
- No tienes que preocuparte por eso. Estamos en el mismo barco. Vamos.
- No si puedes evitarlo. No te alejes. Saldremos de esta.
Saliendo por la puerta del medio del escondite de Quinn:
- Lord Arrin: ¡Bandidos! ¡Ayuda!
- Aldeana: ¡Que alguien dé la alarma! ¡Llamad a la guardia!
Tras sacar a Quinn por la entrada del pueblo:
- <Nombre del personaje>: Quinn, tienes suerte de estar vivo. Si no hubiera llegado aquí a tiempo...
- Quinn: Ya lo sé, ya lo sé. Últimamente no me he portado muy bien, y lo siento. Tú sí que eres mi amigo... no como Pete Dos Filos.
- <Nombre del personaje>: Pete aún no ha terminado. Vendrá a buscarnos cuando se dé cuenta de que su plan ha fracasado.
- Quinn: Oh, no. Reconozco esa mirada en tus ojos. ¡Vas a decírselo a los Serafines!
- <Nombre del personaje>: El capitán Thackeray me debe un favor, y esto le viene que ni pintado. Reúnete conmigo en la taberna, Quinn. Es hora de acabar con Pete Dos Filos... para siempre.
Después de la cinemática:
- Quinn: Nos encontraremos luego en la taberna.
Mi historia[editar]
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