Libros: Obras selectas de Garradorada
Otras imágenes
|
Mapa interactivo
|
Libros: Obras selectas de Garradorada es una estantería junto a Snargle Garradorada en el Ojo del Norte, donde aparecen sus novelas, notas y borradores a medida que los coleccionas como parte del logro En busca de inspiración.
Localización[editar]
- Montañas Picosescalofriantes
- Este estante está dedicado a las novelas, notas y borradores de Snargle Garradorada. Llama la atención lo bien organizado que está.
- Leer un fragmento de "Un romance kralkatórrido." (Si has recogido el libro)
"Un romance kralkatórrido", por Snargle Garradorada
Capítulo 57
La tormenta de la Marca que rugía en el exterior era un simple céfiro comparada con la tormenta que asolaba el corazón de Hubert.
La puerta se abrió de un golpe y aquella que lo atormentaba, aquella que había sido su amante, entró como un vendaval.
—Puede que el dragón haya cristalizado mi cuerpo —dijo su enamorada marcada de élite—, pero tú, Hubert... tú has cristalizado mi corazón.
—¿Y eso es bueno? —preguntó Hubert, a lo que ella respondió acercándosele. Duros ángulos tocaron la blanda carne en un beso largo, apasionado y sorprendentemente tierno. Y Hubert se percató de que quizá, y solo quizá, podría volver a amar.
- Leer un fragmento de "El amor es ciego." (Si has recogido el libro)
"El amor es ciego", de Snargle Garradorada
Capítulo 4
Karenina era su nombre. Nada más verla le cambió la vida a Svanhild.
¿Eran todos los draga tan hermosos? Nunca se había parado a pensarlo, no mientras los masacraba. Tan solo eran una molestia que había que erradicar de las colinas. Pero ahora las preguntas la acosaban como panteras de las nieves hambrientas.
Tenía que saber más, aunque eso implicase hacer una montaña de una topera.
Solo había una manera. Svanhild tendría que infiltrarse. Svanhild tendría que convertirse... en un topo.
- Leer un fragmento de "Conexiones en la Niebla." (Si has recogido el libro)
"Conexiones en la Niebla", de Snargle Garradorada
Tianni se las había ingeniado para salir del Dominio de los Perdidos, había esquivado a la muerte en los Campos de Batalla Eternos y había burladoa al mismísimo Rey Loco... pero ahora, en la frontera entre la Niebla y Tyria, entre la otra vida y la vida que había dejado atrás, todo su genio científico resultaba inútil. Pero su motivación no era científica, así que cerró los ojos y saltó.
Un extraño cosquilleo. La sensación de hundirse. ¿Había funcionado?
Abrió los ojos. Ante ella estaba Zipp. Su Zipp. El que, incluso aunque se pringó de licor de légamo con la sorpresa, seguía siendo el bookah más guapo que jamás había visto.
Con los pies plantados con firmeza de nuevo en el suelo de Rata Sum, Tianni sintió algo nuevo. No era alivio. No era determinación. Era esperanza: auténtica esperanza.
- Leer un fragmento de "El Pacto de Cerranegro." (Si has recogido el libro)
"El Pacto de Cerranegro", de Snargle Garradorada
Atizarrunas apenas podía entender lo que acababa de presenciar. De pronto todo cobró sentido. El porqué de que Llamalenta y la emperatriz Jenny estuvieran dispuestos a olvida años de hostilidades. El porqué de que de pronto hablaran con tanto entusiasmo del "potencial" de una alianza entre charr y humanos.
Se agarró la melena mientras lágrimas de ira le cubrían las mejillas. ¿Cómo podía Llamalenta MIRAR siquiera a Jenny así? ¿Qué había en la figura sin pelo de esta que pudiera atraer a unos charr rudos, fuertes y pulcros como ellos?
¡Maldita sea, si esa mosquita muerta no tenía ni cuernos! ¿Es que ya nadie apreciaba la suave curvatura de unos cuernos?
"A Llamalenta le corresponde estar a MI lado, como MI aliado, MI confidente, MI amigo íntimo... Mi..."
No. La Legión de la Prole no lo toleraría. No si de Atizarrunas dependía.
- Leer un fragmento de "Promesa al destino." (Si has recogido el libro)
"Promesa al destino", de Snargle Garradorada
Este tomo está tan gastado que apenas resulta legible, pero la capa de cuero conserva la sinopsis:
Tras el devastador rechazo por parte de su reina, el capitán Rogan Fackeray juró que jamás volvería a amar. Pero, cuando el deber hace que acabe en una celda de una sola cama compartida con el apuesto y aguerrido tribuno Gritlock, el juramento de Rogan se ve puesto a prueba. Del autor del superventas "Un romance kralkatórrido", llega un sensual baile entre humano y charr que va más allá de los límites inexplorados del deseo entre especies.
- Leer un fragmento de "Las pasiones de Faren." (Si has recogido el libro)
"Las pasiones de Faren", de Snargle Garradorada
Dedicado a lord Faren, un generoso mecenas.
CAPÍTULO 1
En lo más profundo de la Selva de Maguuma, el mundo aba de ser salvado. Mordremoth ha caído... bajo las flechas del amor.
Sí, amigos míos, esa es la verdad: no fueron las espadas las que pusieron fin a la guerra. Pues, si bien el comandante del Pacto conquistó la mente del dragón, lord Faren conquistó el corazón del dragón.
"Nadie puede saber que sigues vivo —dijo Faren mientras una lágrima le corría por la mejilla—. No creerían en ti como hago yo."
"Lo sé, mi caballero de brillante armadura —le respondió el dragón en un susurro—. Pero debes dejarme, pues tienes más vidas que salvar... y más amor que dar."
- Leer un fragmento de "Tengu para dos." (Si has recogido el libro)
"Tengu para dos", de Snargle Garradorada
CAPÍTULO 2
"No solemos dejar entrar a forasteros —dijo Makoto mientras envolvía a su pequeño amante asura con sus emplumados brazos—, así que tienes que jurarme que no le hablarás a nadie de lo que veas aquí."
Prapp observó con asombro las maravillas que lo rodeaban. "Y si se me escapa?", dijo. Tenía una hipótesis, claro está, pero... ¡una ciudad hecha por completo de caramelo implicaba varios artículos de investigación innovadora!
Makoto soltó una risita completamente desprovista de alegría.
"Tendría que matarte, claro está."
En fin, hipótesis confirmada.
- Leer un fragmento de "Koss sobre Koss: Sin censura." (Si has recogido el libro)
"Koss sobre Koss: Sin censura", de Snargle Garradorada
CAPÍTULO 12
Melonni, Dunkoro, Talkora[sic]... Koss había tenido muchos amantes a lo largo de su vida, pero siempre sentía que le faltaba algo, siempre había necesitado... más. Y ahí, por fin, estaba la solución.
Al fin y al cabo, ¿quién podría ser más que Koss?
Koss miró con ansia a los ojos de su álter ego, que le devolvió una mirada cargada de parejo afecto. Por fin habían encontrado lo que les faltaba para sentirse completos: Koss, a un igual; y el álter ego, a un objetivo más digno que cualquier otro.
Conforme Koss abrazaba a Koss, su amor se desplazaba más allá de la realidad. Desafiaba a las dimensiones. Su viaje juntos no había hecho más que empezar.
- Leer un fragmento de "El cantar de Svan." (Si has recogido el libro)
Manuscrito: "El cantar de Svan", de Snargle Garradorada
Fryst intentó congelarle el corazón, pero no pudo apagar el calor de sus mejillas.
Era un buen svanir, nunca puso en duda las enseñanzas de su chamán y siempre trató con frialdad a las mujeres, sabedor de que no eran dignas del Dragón.
Pero aquello fue antes de Brenna. Brenna, tan diestra con la espada y tan certera con las pullas. Qué sonrisa tenía.
Unas preguntas ardientes revelaron fisuras en unos ideales congelados largo tiempo. ¿Qué era aquella extraña sensación de deshielo que sentía en el estómago? ¿Acaso todo lo que le habían enseñado era mentira? Empezó a valorar que tal vez debería descansar.
Ahora yo también puedo dormir. Podemos soñar bajo el hielo. Descansemos, aunque solo sea un momento. Descansemos, aunque solo sea un momento. Rindámonos. Todos juntos dormiremos para siempre. Creo que voy a echarme.
- Leer un fragmento de "Comandante de tu corazón." (Si has completado el logro En busca de inspiración)
"Comandante de tu corazón", de Snargle Garradorada
CAPÍTULO 35
"No creas que no me he dado cuenta —dice el comandante del Pacto, y te da un vuelvo el corazón—. De cómo me has seguido en pos de mil y un peligros. De lo crucial que has sido contra los resurgidos y los mordrem. Tenerte a mi lado no tiene precio."
Una pausa. Deberías sentir orgullo y lo sabes. Pero claro, te ha hecho venir por motivos estrictamente profesionales. Se te encoge el corazón conforme se alarga el silencio y las palabras que quieres pronunciar se te atragantan.
Pero, luego, el comandante se te acerca. "También me he dado cuenta de cómo me miras. —Puedes sentir su calor—. De cómo me has mirado siempre."
"Así que... —prosigue el comandante mientras te toma la mano— quería proponerte... otra clase de pacto. Un pacto para toda la vida. Contigo."
Casi al instante, una bandada de níveas gaviotas alza el vuelo.
- Ya los veré luego.
Logros relacionados[editar]