La flor de la juventud
La flor de la juventud
- Año
- 1325 d.É
- Argumento
- Historia personal
- Capítulo
- Justicia para Riannoc
- Localización
- Valle de los Asaltantes
(Selvas Brisbanas)
Cámara de Omphalos
(La Arboleda) - Nivel
- 30
- Raza
- Sylvari
- Orden
- Orden de los Susurros
- Precedido por
- Espinas afiladas
Muros de zarzas - Seguido por
- La manzana podrida
Problema de raíz - API
- 244
La flor de la juventud es parte de la historia personal para los personajes sylvari que decidieron escoger la Orden de los Susurros en la misión anterior.
Objetivos[editar]
Descubre si los bandidos saben qué le pasó a Waine.
- Reúnete con Cai en el exterior del campamento de los Bandidos de Robbari.
- Habla con el líder de los Bandidos en el interior del campamento.
- Pelea contra Dasha la Aporreadora.
- Ayuda a Karl Revientacódigos con el cofre.
- (Ayuda a la cocinera Forah con la caza.)
- Caza moa para la cocinera Forah.
- Derrota a Oswalt y a sus lacayos.
- Regresa junto a la líder de los Bandidos Dola.
- Persigue a Jat y obtén respuestas.
- (Defiende a Jat de los jinetes del viento.)
- Defiende a Jat de los jinetes del viento.
Vuelve a la Arboleda.
- Habla con el Árbol Pálido.
- Elige tu siguiente iniciativa.
Recompensas[editar]
Guía[editar]
Habla con la Líder de los Bandidos Dola en la casa del árbol, quien te encomienda tareas en el campamento:
- Lucha contra Dasha la Aporreadora. Puedes usar las armas improvisadas o tus armas habituales.
- Ayuda a Karl Revientacódigos. El código es "4" y "9".
- Caza moa para la Cocinera Forah. Fuera del campo interactúa con el Helecho sospechoso, espera a que se reúnan los moa y mátalos.
- Supera al Señor Oswalt. Gana primero a los lacayos insultadores y luego habla con él.
Entonces vuelve con la líder, quien te indica que Jat conocía mejor a Waine. Él intenta escapar, así que ve tras él y sálvalo de los jinetes del viento.
Entonces vuelve a la Arboleda y decide cómo recuperar Caladbolg: luchar contra Waine junto con la Vigilia (La manzana podrida) o manipular el torneo con la Orden de los Susurros (Problema de raíz).
PNJs[editar]
Aliados[editar]
Valle de los Asaltantes[editar]
- Asaltante bandido
- Carterista bandido
- Cocinera Forah
- Dasha la Aporreadora
- Explorador bandido
- Fusilero bandido
- Guardia bandido
- Jat
- Karl Revientacódigos
- Lacayo cocinero bandido
- Lacayo insultador
- Líder de los Bandidos Dola
- Señor Oswalt
Cámara de Omphalos[editar]
- Sylvari
Enemigos[editar]
Objetos[editar]
Diálogo[editar]
Valle de los Asaltantes[editar]
En llegar y reunirte con Cai:
- Cai: ¡Ahí estás, heraldo! Estaba dando los últimos toques a los disfraces.
- Cai: Con esto no sabrán que somos sylvari. ¿Preparado?
Hablando con Cai rápidamente antes de la cinemática:
- Cai: Ya estoy. ¿Y tú?
- Totalmente.
Cinemática con Cai:
- Cai: Llevo un tiempo trabajando en este conjuro de camuflaje. ¡Solo el sombrero me llevó tres meses! Sabía que resultaría útil parecer un humano.
- Cai: ¿Qué te parece? No tengo el talento de la reina de Linde de la Divinidad, pero mi trabajo como hipnotizadora le viene muy bien a la Orden de los Susurros.
- <Nombre del personaje>: La verdad es que es un tanto desconcertante. Me siento cursi y torpe.
- Cai: No tendrás que llevarlo mucho tiempo. Según nuestros registros, el escudero de Riannoc se llamaba Waine. Nació en este asentamiento humano.
- <Nombre del personaje>: Un momento, ¿sabías cómo se llamaba el escudero de Riannoc? ¿Por qué no lo has dicho antes?
- Cai: La Orden de los Susurros sabe mucho más de lo que la gente cree. Somos los ojos y oídos de Tyria. Cuanto más sabemos, más sutilmente actuamos.
- Cai: No tenemos un gran ejército ni una miríada de investigadores. En cambio, usamos la política y el chantaje para dar forma al mundo.
- <Nombre del personaje>: ¿Y si no conseguimos lo que queréis mediante el chantaje?
- Cai: Pues lo robamos, por supuesto. Bueno, venga; esos disfraces no durarán para siempre y tenemos mucho que investigar.
- Cai: Recuerda: somos bandidos humanos grandes y blandengues. No tenemos miedo a nada. ¿Listos? ¡Vamos!
Hablando con Cai:
- Cai: ¡Muy bien! Ahora solo tenemos que colarnos y preguntarle a su líder lo que sabe sobre Waine.
- ¿Crees que nos lo dirá?
- No confiará en nosotros de inmediato. Tendremos que convencerla... de algún modo. ¡No bajes la guardia, heraldo!
- Estaré atento, no te preocupes.
Acercándote al Guardia bandido:
- Guardia bandido: ¿Adónde crees que vas, forastero? Lárgate o acabarás muy mal.
- Este sitio está infestado de... er... moa demonio. ¡Déjame pasar o sufrirán muchos inocentes!
- ¿Unos qué demonio? No me pagan para eso. Habla con Dola, en el fuerte del árbol a la izquierda.
- ¡Me voy!
- Saludos. Acabo de convertirme en bandido y tengo que hablar con tu despiadada líder.
- ¿Te has convertido en bandido? ¡Ja! Muy buena. Si estás buscando a Dola, está en el fuerte del árbol a la izquierda.
- Sí... ¡Era una broma! Claro. Gracias.
- Tengo noticias de Kryta para la líder. ¿Puedes indicarme el camino?
- Mmm. Bueno, pareces espabilado, ¡pero será mejor que no me hagas perder el tiempo! Si buscas a Dola, está en el árbol de la izquierda.
- Intentaré ser conciso. Gracias.
- ¡Mantendré las distancias, gracias!
Hablando con los demás bandidos antes que Dola:
- Dasha la Aporreadora: Sigue caminando o te llevarás un buen martillazo.
- Dasha la Aporreadora amenaza a <Nombre del personaje>.
- Karl Revientacódigos: Estoy ocupado. Piérdete.
- Karl Revientacódigos señala a <Nombre del personaje>.
- Señor Oswalt: Piérdete, colega. Estoy ocupado.
- Señor Oswalt no está de acuerdo con <Nombre del personaje>.
- Cocinera Forah: Largo, extraño. Aquí no hay nada para ti.
- Cocinera Forah no está de acuerdo con <Nombre del personaje>.
- Jat: Si no has venido a hacer negocios, no me hagas perder el tiempo.
- Jat amenaza a <Nombre del personaje>.
Cinemática con Dola:
- Líder de los Bandidos Dola: Carne fresca; bien Si no vienes a luchar contra la reina tirana, lárgate o morirás.
- Cai: ¿Luchar contra la reina de Kryta? ¡Oh! Sí, claro. Venimos a eso. Ah, y a buscar a un viejo amigo llamado Waine. ¿Anda por aquí?
- Líder de los Bandidos Dola: ¿Waine? Lo conozco, pero no sé si eres de fiar. Puede que la gente del campamento necesite ayuda. Demuéstrales que eres de fiar y me fiaré también.
Hablando con PNJs antes de completar más tareas:
- Cai: ¿Tareas y quehaceres? ¡Fácil! Parece una oportunidad para fisgar un poco.
- ¿Y ahora qué hacemos? ¿Con quién hablamos?
- Deberíamos preguntarle al líder de los bandidos para conseguir más información o ir por ahí para ver quién habla con nosotros.
- Prefiero improvisar.
- Tienes razón.
- Líder de los Bandidos Dola: Si quieres algo, date prisa. Soy una mujer ocupada.
- Estoy aquí para ayudar, como sugeriste.
- Hay un lugar para hacer prácticas, o también puedes conseguirle al chef un poco de estofado, o abrir la caja asura que hemos birlado o apañártelas con Oswalt.
- ¿Prácticas? ¿Alguien necesita un combate de entrenamiento?
- Sí. Pasando a torre de vigilancia. Busca el espacio abierto y a una chica algo tosca llamada Dasha.
- ¿Qué más se puede hacer por aquí?
- Lo haré. Hasta luego.
- ¿Quién es Oswalt y cuál es su problema?
- Es un sabihondo del lugar. Le encontrarás abajo, en la tienda de campaña.
- ¿Qué más se puede hacer por aquí?
- Le haré una visita, gracias.
- ¿Dónde puedo encontrar al chef?
- En los fogones que hay entre los fuertes. La cocinera se llama Forah.
- ¿Qué más se puede hacer por aquí?
- Iré a verle.
- ¿Hace falta abrir una caja?
- Se "cayó" de una caravana asura. Pero no conseguimos abrir el maldito trasto. Echarle un mano a Karl, ¿eh?
- ¿Qué más se puede hacer por aquí?
- Apuesto a que consigo abrirla. Lo intentaré.
- Ya encontraré algo que hacer. Gracias.
- No te preocupes. Me las apañaré por mi cuenta.
Ayudando a Forah:
- Cocinera Forah: Hmm. ¿Qué quieres, sabandija?
- Dola ha dicho que podría ayudar.
- ¿Se te da bien matar moa? Nos falta pitanza y no vendría mal un poco de estofado.
- Claro. ¡Indícame dónde están esos plumíferos!
- ¡No los persigas! ¡Así no harás más que ahuyentarlos! Toma un cebo para moa. Déjalo en la corteza del árbol y los pájaros vendrán enseguida.
- Eso tiene sentido. Usaré el cebo. ¡Vuelve pronto!
- ¿Cazar moa? ¡Eso es fácil! ¿No tienes algo peligroso que hacer?
- ¡Oye! ¡Esos pájaros son muy violentos! ¿Quieres saber cómo perdí el ojo? ¡Por un picotazo de moa, ya ves! Será mejor que escuches y uses la cabeza.
- Está bien, está bien. ¿Cómo los cazo? (igual que "Claro. ¡Indícame dónde están esos plumíferos!")
- Si es tan peligroso, ¿por qué no cazamos unos jabalíes? ¿O conejos? (igual que "¿Por qué no cazar un jabalí o un conejo?")
- Yo me ocupo. En algún momento.
- ¿Por qué no cazar un jabalí o un conejo?
- Un moa me quitó el ojo. Me lo sacó de cuajo. ¡Y ahora los cocino para vengarme! Es una venganza muy sabrosa.
- Vaya, de acuerdo. ¡Los moa! ¿Voy a por ellos y les ataco? (igual que "Claro. ¡Indícame dónde están esos plumíferos!")
- ¿Moa? Esperaba algo más exótico. (igual que "¿Cazar moa? ¡Eso es fácil! ¿No tienes algo peligroso que hacer?")
- Espero que a ti te vaya mejor.
- Quizá más tarde. Tengo un poco de lío ahora mismo.
- Ahora mismo, nada. Perdón por molestarte.
- Cocinera Forah: ¿Has encontrado ya a esos moa?
- ¡Ah, sí! Moa. Eso voy a hacer.
- Helecho sospechoso: El árbol parece normal.
- Lanza el cebo para moa contra él.
- Marcharse.
Tras matar los moa:
- Cai: Puaj, moa quemado. No me explico cómo pueden comer eso.
- Cocinera Forah: ¡Eh! ¡Vosotros! ¡Más moa para el puchero! ¡Id por ellos!
Hablando con Forah tras ayudar:
- Cocinera Forah: ¡Gracias a ti, esta noche cenaremos estofado de moa!
- Cocinera Forah vitorea a <Nombre del personaje>.
Ayudando a Karl:
- Karl Revientacódigos: Es un trabajo complicado. Si no puedes ayudar, lárgate.
- Quizá pueda ayudar. Déjame ver ese cerrojo.
- Es un cerrojo asura. No mostrará sus secretos tan fácilmente, ¡te lo aseguro!
- ¿Puedo probar?
- Claro, adelante. Tengo las notas ahí. Buena suerte, ¡la necesitarás!
- Gracias.
- Buena suerte con eso.
- Puede que en otra ocasión.
- Karl Revientacódigos: ¿Y bien? Descifra la combinación, sabelotodo. Las instrucciones deberían estar por escrito.
- Karl Revientacódigos se encoge de hombros frente a <Nombre del personaje>.
- Notas de combinación de cerradura: El primer número es siete. El segundo es menor que el primero. El segundo es par. El tercero es dos más que el primero. El segundo multiplicado por dos es uno menos que el tercero.
- Muy fácil. A ver ese cerrojo.
- Cofre cerrado: El primer número está ajustado en siete. Elige un segundo número.
- Uno.
- El cierre se resiste hasta que el número vuelve a cero. Mala elección.
- Lo intentaré de nuevo.
- Puede que tenga suerte más tarde.
- Dos. (igual que "Uno.")
- Tres. (igual que "Uno.")
- Cuatro.
- El número cuatro encaja perfectamente, y el mecanismo se mueve. Elige un tercer número.
- Uno. (igual que "Uno.")
- Tres. (igual que "Uno.")
- Seis. (igual que "Uno.")
- Ocho. (igual que "Uno.")
- Nueve.
- El número encaja perfectamente y el cofre se abre.
- ¡Genial! ¡Es hora de abrir el cofre!
- Seis. (Same as "One.")
- Karl Revientacódigos: ¡Lo abriste! ¿Qué? ¿Vacío? ¡Bah!
- Karl Revientacódigos: Miserable sabandija... ¡Fuera de aquí! Ve a decirle a Dola que me ayudaste y déjame en paz.
- Cai: ¡Has descifrado ese código de una forma impresionante, heraldo! Serías de gran ayuda en la Orden de los Susurros.
Hablando con Karl otra vez:
- Karl Revientacódigos: ¡Uf! ¡Pasé horas y horas con esa maldita cosa!
- Karl Revientacódigos está llorando.
Ayudando a Oswalt:
- Señor Oswalt: ¿Qué te pasa, viajero?
- En realidad estoy aquí para ayudarte con tus problemas.
- Pfff. No es nada que puedas solucionar. Te estaré observando y puede que hablemos luego.
- Venga, algo podré hacer. ¿Qué haces aquí en el campamento?
- Soy un maestro de los insultos, colega. Puede que si te pones a prueba con mis estudiantes hable más contigo. Y ahora, lárgate.
- Volveré, señor pez gordo.
- Me acordaré de tus palabras.
- Ugh. No importa.
- Lacaya insultadora: ¿Crees que sabes insultar? Enséñame tu mejor golpe, novato.
- Claro. ¿Qué tema vas a elegir?
- ¡Mi brillante mente! ¡Mi cerebro infunde temor en cada rincón de este puesto avanzado!
- Pfff. ¡Querrás decir que tu PESTE es lo que infunde temor!
- Qué falta de originalidad. Pero a la vez... muy punzante. ¡Maldito seas! ¡Tú ganas esta vez!
- ¡A por el siguiente reto! (si es el primer reto)
- Creo que ya soy lo bastante bueno para enfrentarme a tu maestro. (si es el segundo reto)
- Seguro que tendría serios problemas... si lo usaras alguna vez.
- Ja, ja. Ah, está bien. ¡Tú ganas! Pero no vayas fanfarroneando por ahí.
- ¡A por el siguiente reto! (si es el primer reto)
- Creo que ya soy lo bastante bueno para enfrentarme a tu maestro. (si es el segundo reto)
- Así que te marginan por eso. Pensaba que era por tu personalidad.
- ¡Eh! Soy encantadora, generosa... Bueno, bueno, me has pillado. Tú ganas. Demonios.
- ¡A por el siguiente reto! (si es el primer reto)
- Creo que ya soy lo bastante bueno para enfrentarme a tu maestro. (si es el segundo reto)
- ¡Pues no!
- ¿Eso es todo? ¿En serio? En serio.
- Pensaré en algo para redimirme. Bah.
- Puede que en otra ocasión.
- No mereces que te dedique tiempo.
- Lacaya insultadora: ¡De acuerdo, de acuerdo! ¡Tú ganas! Vaya.
- Lacaya insultadora no está de acuerdo con <Nombre del personaje>.
- Lacayo insultador: Debes de pensar que eres lo más si vienes a molestarme. ¡No pensarías un buen insulto ni aunque te fuera la vida en ello!
- ¿Quieres ver lo que tengo, carapez?
- ¿Carapez? ¡Ja! Esfuérzate más. ¡Las mujeres se derriten al verme!
- Sí, porque no se ve a un hylek con traje humano todos los días.
- ¡Hylek! ¡Pues...! Mira, no ha estado mal.
- ¡A por el siguiente reto! (si es el primer reto)
- Creo que ya soy lo bastante bueno para enfrentarme a tu maestro. (si es el segundo reto)
- Será porque les llega tu aliento.
- ¡Eh! Que me limpio los dientes dos veces... a la semana. Oh, bien. ¡Ahí me has dado!
- ¡A por el siguiente reto! (si es el primer reto)
- Creo que ya soy lo bastante bueno para enfrentarme a tu maestro. (si es el segundo reto)
- Eso explica por qué no se te acerca ninguna.
- Espera, no, quiero decir... No quería... Lo que iba a decir es... ¡Grrr! ¡Me has pillado! Bien.
- ¡A por el siguiente reto! (si es el primer reto)
- Creo que ya soy lo bastante bueno para enfrentarme a tu maestro. (si es el segundo reto)
- ¡Carapez! ¡Carapez! ¡Carapez! ¡Ja!
- Es lo más penoso que he oído nunca. Sal de aquí, niñato.
- Mmm. La próxima vez ganaré. Ya lo verás.
- No me interesan.
- No vale la pena.
- Lacayo insultador: Para mí no más, gracias. ¡Aún me escuecen las orejas!
- Lacayo insultador no está de acuerdo con <Nombre del personaje>.
- Señor Oswalt: Ya veo que estás dando vueltas y molestando a todo el campamento. ¿Qué quieres?
- ¿Cómo consigo tu beneplácito para Dola?
- Voy al bar y necesito un buen insulto por si el camarero intenta algo. ¿Tienes alguno bueno?
- Darte un puñetazo en la cara sería deprimente. ¡Hay como mil personas que ya se me han adelantado!
- No está mal. ¡Usaré esa la próxima vez que vaya a la ciudad! Dile a Dola que te doy el visto bueno.
- Gracias, Oswalt.
- Cuando llegas a una aldea, el tonto del pueblo se retira. ¡Nadie puede competir contigo!
- ¿El tonto del pueblo? Mm. Habría que refinarlo un poco, pero me gusta la idea. De acuerdo. Lo usaré. Dile a Dola que me has ayudado.
- Por supuesto.
- ¿Qué te parece esto? ¿Eres el recogeflechas del pueblo? Lo pregunto por la cara tan picada que tienes.
- ¡Ja! Esa sí que es buena. Además, el camarero es más feo que un pecado, así que es perfecto. Gracias, y coméntale a Dola que he dicho que eres buena compañía.
- Lo haré, Oswalt. ¡Gracias!
- Tengo que irme a pensar algo bueno. Quizá más tarde.
- ¿A qué vienen tantos insultos?
- El camarero de Beetletun es muy ingenioso y siempre se está metiendo conmigo. Necesito algo para pincharlo yo.
- Así que necesitas buenos insultos para pillar desprevenido al camarero, ¿eh? (igual que "¿Cómo consigo tu beneplácito para Dola?")
- Quizá hablemos luego.
- Perdona por molestarte. No importa.
- Cai: Nunca se me han dado bien los insultos. Será cosa de timidez.
Hablando con Oswalt otra vez:
- Mister Oswalt: Le estás pillando el truco, jefe. ¡Ahora sal ahí fuera y haz que me sienta orgulloso!
- Mister Oswalt vitorea a <Nombre del personaje>.
Ayudando a Dasha:
- Dasha la Aporreadora: ¿Cuál es tu historia, forastero?
- Dola me ha pedido que ayude.
- Tengo algo perfecto. ¡Ayúdame con las prácticas de lucha! Tengo que aprender a luchar con armas improvisadas.
- ¿Te refieres a botellas, cubos y cosas así?
- ¡Exacto! Me sería de mucha ayuda, forastero. ¡Avísame cuando sepas qué quieres usar y entonces lucharemos!
- Me parece bien. ¿Qué opciones tengo? (igual que "¿Qué opciones tengo?")
- Ahora mismo no. Volveré.
- ¿Qué tipo de armas improvisadas?
- Lo que sea que encuentre en el suelo. Las cosas típicas de una pelea de bar.
- ¿Y si lucho contigo con mi arma?
- Preferiría que no lo hicieras, pero... supongo que una pelea es una pelea. Aun así, ha sido una buena práctica.
- ¿Qué otras armas puedo usar? (igual que "¿Qué opciones tengo?")
- Quizá después.
- ¿Qué opciones tengo?
- Tengo una botella, una tabla, una barra de metal y una bomba. La última no es muy útil, ¡pero puede ser divertido!
- ¡Me quedo con la barra de metal!
- ¿En serio tienes una bomba? Me la quedo.
- ¡Pásame la tabla y empezaremos a luchar!
- Mejor una botella delante que... bueno, ya sabes. Elijo la botella.
- Me encantaría ayudar... en otro momento.
- No importa. Ahora mismo no me interesa.
- Quizá en otro momento. Lo siento.
- Ahora mismo, nada. Perdón por molestarte.
- Dasha la Aporreadora: Debes saber que no se lo pongo fácil a nadie.
- Cai vitorea a <Nombre del personaje>.
- Dasha la Aporreadora: Luchas como una mariposa, recién llegado. ¡Deja de moverte!
- Dasha la Aporreadora: ¡Buena pelea! ¡Creo que me estoy quedando sin aliento! Será mejor que acabe con esto...
- Dasha la Aporreadora: ¡Eres un pendenciero de cuidado, extranjero!
- Dasha la Aporreadora: Ve a decirle a Dola que me ayudaste ¡y vuelve por más si quieres!
- Cai: Las armas son tan poco manejables... Oye, no me mires así. ¡Esta espada es solo una herramienta!
- Cai se encoge de hombros frente a <Nombre del personaje>.
Hablando con Dasha otra vez:
- Dasha la Aporreadora: ¡Bien hecho! He aprendido unos cuantos trucos de ti, forastero. ¡Gracias!
- Dasha la Aporreadora está de acuerdo con <Nombre del personaje>.
Hablando con Cai después de completar todas las tareas:
- Cai: Con esto bastará. Mantén la calma y veamos qué tiene que contarnos el líder de los bandidos.
- Lo haré, Cai.
Cinemática con Dola:
- Líder de los Bandidos Dola: No está mal, leñador. Todo el campamento habla de ti. Dirigir este lugar es como agrupar a un montón de gatos. ¿Conoces bien a Waine?
- <Nombre del personaje>: Totalmente. Waine y yo somos amigos desde que éramos humanos debiluchos y diminutos.
- Líder de los Bandidos Dola: Dirás desde que erais niños, ¿no? Sí eso. Entendido. Je. Eres muy gracioso, leñador. Mira, apenas lo conozco, pero para Jat es como un hermano.
- Líder de los Bandidos Dola: ¡Eh, Jat! Hay alguien aquí que quiere hablar contigo sobre Waine.
Después de la cinemática:
- Jat: ¡No te me acerques!
- Cai: ¡Espinas y zarzas! ¡Jat ha huido! ¡Hay que darle caza!
- Cai: ¡Tras esa... cosa humana... bigotuda!
Hablando con los PNJs antes de ir a por Jat:
- Líder de los Bandidos Dola: Ahora tengo que retirarme. Tus problemas con Jat no son asunto mío.
- ¿No te importa si voy a buscarle?
- Oye, que soy de los bandidos, no del Templo de Dwayna. Haz lo que quieras, pero no toques mis armas ni mi dinero.
- De acuerdo. Pues adiós.
- Tomo nota.
- Cai: ¡Humanos! Están todos locos. ¡Atrapémosle antes de que se haga daño intentando huir!
- ¡Estoy en ello!
En llegar a Jat:
- Jat: ¡Me equivoqué! ¡Me equivoqué! ¡No te vayas! ¡Ayúdame! ¡Ayuda!
Cinemática tras salvar a Jat:
- <Nombre del personaje>: Tranquilo, Jat. Solo queremos encontrar a Waine. ¿Sabes dónde está?
- Jat: Si me tocas un pelo, Waine irá a por ti y te molerá a palos. ¡Él también puede hacerlo! ¡Tiene una espada mágica!
- Cai: ¿Una espada mágica? Deja que adivine. Así de larga, como con hojas, brillante...
- Jat: ¡Esa! Se la robó a un sylvari alelado llamado Riannoc. ¡Se la birló de la mano y lo dejó luchando contra unos liches!
- Jat: Waine es un tipo listo. Con esa espada ganó todos los torneos en la arena de Arco del León... hasta que lo pillaron haciendo trampas.
- Jat: No creas que está en baja forma. ¡Sigue luchando en los fosos cerca del Paso del Guardián, así que más te vale no cabrearlo!
- <Nombre del personaje>: Gracias. Es justo lo que necesitábamos saber.
- Jat: ¿Eh?
- <Nombre del personaje>: Venga, Cai. Vamos a llevar esta información al Árbol Pálido. Y esta vez, contaremos todo lo que sabemos.
Después de la cinemática:
- Jat: Seguro que les he proporcionado risas para rato.
- Cai: ¿Quizá deberías tantear nuevas líneas de trabajo?
- Jat: Es una buena idea. Nos vemos.
Hablando con Cai después de la cinemática:
- Cai: ¡Vaya, esto se te da bien! La Orden de los Susurros tendría suerte si fueras uno de sus agentes, <Nombre del personaje>.
- ¡Es muy halagador, gracias!
Cámara de Omphalos[editar]
Hablando con los representantes en la Cámara de Omphalos:
- Branthyn: Hola, Heraldo. Será mejor que terminemos todo antes de charlar, ¿no?
- Sí, claro. Disculpa.
- Cai: No pierdas el tiempo, <Nombre del personaje>. La Madre Árbol te espera.
- Me apresuraré.
Con el Árbol Pálido:
- Avatar del Árbol: Bienvenido, heraldo. Dime, ¿ya sabes qué le ocurrió a Riannoc?
- <Nombre del personaje>: Sí, Madre. Riannoc murió luchando contra Mazdak el Maldito, pero le robaron la espada.
- Caithe: ¿Robada? ¿Qué enemigo ruin y despreciable osa robar a Caladbolg?
- <Nombre del personaje>: No era un enemigo. Lo traicionó un amigo. Waine, el escudero de Riannoc. Durante la batalla, le robó el arma y huyó.
- Caithe: Traicionado, y por alguien a quien apreciaba. ¿Por qué los humanos son tan dados a la traición...?
- <Nombre del personaje>: Waine aún tiene con él a Caladbolg. La ha estado usando para competir en torneos de gladiadores.
- Branthyn: Insisto en que la Vigilia os acompañe. ¡Plantaremos cara a ese miserable en el torneo y le arrancaremos la piel!
- Branthyn: Nuestra orden se sustenta en los principios de valor y servicio. No soporto oír que un traidor sin honor empuña a Caladbolg.
- Cai: Mira que eres ingenua. ¡Waine huirá si advierte vuestra presencia! Podemos amañar el torneo con algún que otro truco.
- Cai: Cuando Waine haya perdido, la Orden de los Susurros podrá robar la espada fácilmente. Deja de pensar en la lucha como solución y dale uso a tu sesera, anda.
- <Nombre del personaje>: Las dos me parecen buen opciones. Iowerth, ¿tú que dices?
- Iowerth: Me temo que los torneos de gladiadores no son el fuerte del Priorato. Mientras consigues la espada, investigaré a Mazdak e intentaré precisar su ubicación.
- Avatar del Árbol: Heraldo, debes recuperar a Caladbolg. Decide y ve a repartir justicia.
Después de la cinemática:
- Cai: ¿Quieres competir en el torneo? Adorable estupidez. ¿Por qué competir si lo podemos arreglar?
- Branthyn: No tienes honor, Cai. Solo hace falta una demostración. Una vez Waine se dé cuenta de que no es rival abandonará.
- Cai: Tú dices honor, yo digo cerebro. Yo lo tengo y tú no.
Hablando con lso demás antes de tomar una decisión:
- Avatar del Árbol: Me apena que el arma de mi campeón esté en manos de un cobarde. ¡Heraldo, recupera el Caladbolg y repara este agravio a nuestro pueblo!
- Por la Tabla, juro que lo haré.
- Trahearne: ¿La Caladbolg sentenciada a ser la navaja de un luchador? Qué desperdicio. Qué tragedia.
- ¿Sabes algo de los poderes de la espada?
- Se dice que la Caladbolg mejora las cualidades de su portador. Fuerza, sabiduría, valor... Todo aumenta gracias a la espada. Su espíritu agranda el tuyo.
- ¿Y Waine? ¿En qué lo ha mejorado a él?
- Waine siempre fue un cobarde. Ahora lo es aún más. Desaprovechar la espada en luchas en foso cuando hay tanto mal en el mundo...
- Yo la recuperaré. Lo prometo.
- Caithe: Yo no subestimaría a Waine. Con espada mágica o sin ella, sobrevivir tantos años en las arenas de luchadores requiere mucha habilidad.
- ¿Cómo sabes tanto de las peleas en Arco del León?
- Experiencia personal, <Nombre del personaje>. Una vez, hace mucho tiempo... bueno, digamos que me traen buenos recuerdos.
- No lo olvidaré.
- Tendré cuidado. Gracias por la advertencia.
- Iowerth: Fascinante, sencillamente fascinante. Esa espada tiene vida propia. Debemos reclamar la Caladbolg y traerla a casa.
- ¿Cómo consiguió el Priorato la información de Waine y las luchas en foso?
- Uno de nuestros agentes en Arco del León está asignado a las luchas en foso. Las documenta todas para evaluar probabilidades. El nombre de Waine estaba en los archivos.
- Eso tiene sentido. ¿Puedo preguntarte otra cosa?
- Es bueno saberlo, gracias!
- ¿Tenía el Priorato más información acerca de la espada?
- Todo lo que ya sabes, con una advertencia. Al parecer, una profetisa de Rata Sum predijo una vez que el regreso de la espada sería la perdición de los dragones.
- ¡Vaya, qué buena noticia! ¿Puedo preguntar algo más?
- Es bueno saberlo, gracias.
- Lo haremos. Espera y verás.
- Branthyn: Ven con nosotros, Heraldo. La Vigilia se encargará de este bandido errante, ¡ya verás!
- Cuéntame más sobre tu plan.
- Waine intimida a sus rivales mediante el miedo y el abuso, pero la Vigilia no se acobardará. ¡Nos enfrentaremos a él, lucharemos contra él y lo venceremos!
- Muy gráfico. ¿Qué piensas del plan de la Orden de los Susurros?
- ¡Bah! Argucias y estupideces. ¿Por qué eso nos hace mejores que Waine?
- De acuerdo, me has convencido. Probaré tu plan. (conduce a La manzana podrida)
- Déjame consultarlo con la almohada antes de decidir.
- Me gusta. Vamos a por la espada... ¡Tanto si quiere Waine o como si no!
- Esto me llevará más tiempo decidirlo.
- ¿Qué piensas acerca del plan presentado por la Orden de los Susurros?' (igual que "¿Qué piensas del plan de la Orden de los Susurros?")
- Deja que me lo piense y después hablamos.
- Cai: No te preocupes, heraldo. La Orden de los Susurros ya tiene un plan para manejar a este escudero errante.
- Cuéntame más sobre tu plan.
- Causamos bastantes problemas y Waine acabará sobrepasado por la situación. Después, nos llevamos la Caladbolg y dejamos a Waine lloriqueando.
- Interesante. ¿Qué te parece el plan de la Vigilia?
- ¿Qué, ponernos delante de Waine gritando: "¡estoy con el Árbol!"? ¿De veras? Venga, sé que eres más inteligente.
- Mmm. Bueno, tu plan suena más divertido. Me apunto. (conduce a Problema de raíz)
- Deja que me lo piense un poco.
- Tienes un buen plan. Lo haré a tu manera, Cai.
- Tengo que pensarlo un poco antes de decidirme.
- ¿Has oído el plan de la Vigilia? ¿Alguna idea? (igual que "Interesante. ¿Qué te parece el plan de la Vigilia?")
- Deja que considere mis opciones y ya veremos.
En elegir el plan de la Vigilia:
- Branthyn: ¡Espero poder trabajar contigo! Nos vemos fuera de la Puerta de Guardapiedra.
- Yo estaré allí.
- Cai: Bueno, que tengas suerte con ese "allanamiento". Si tienes algún problema, estaré aquí listo para ayudar.
- Todo irá bien. Gracias, Cai.
En elegir el plan de la Orden de los Susurros:
- Branthyn: Espero que tengas suerte, Heraldo. No es como yo enfocaría la cuestión, pero... allá cada cual.
- Gracias por entenderlo. Nos vemos pronto.
- Cai: ¡Fantástico! Va a ser divertido. Nos vemos al este de la Puerta de Guardapiedra y le daremos una lección a Waine.
- Allí estaré.
Mi historia[editar]
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