Despertar
- Este es un artículo acerca de el historia personal. Para el habilidad, véase Despertar (Justiciero).
Despertar
- Año
- 1325 d.É
- Argumento
- Historia personal
- Capítulo
- Persiguiendo el Sueño
- Localización
- Bosque de Caledon
(Selva de Maguuma)
La Terraza del Soñador
(La Arboleda) - Nivel
- 10
- Raza
- Sylvari
- Elección
- Sueños del Escudo de la Luna
- Precedido por
- Lucha contra la Pesadilla
- Seguido por
- Contra la oscuridad
- API
- 212
Pantalla de carga |
Despertar es parte de la historia personal para los personajes sylvari que han escogido El Escudo de la Luna.
Objetivos[editar]
Habla con la sanadora Aviala.
- Habla con la sanadora Aviala.
Encuentra el ungüento de trol.
- Investiga la madriguera de los troles.
- Consigue el ungüento de trol.
- Cabecilla trol de la selva.
Dale el ungüento de trol a la sanadora Aviala.
- Dale el ungüento de los troles a la sanadora Aviala.
Llévale el antídoto a Caithe.
- Habla con Caithe en la Arboleda.
- Asegúrate de que Tiachren se recupere.
Recompensas[editar]
Clic aquí para editar los datos de recompensa
- Todas las profesiones
- 2641
- 50
- Saco de cuero (8 casillas)
- Saco de botín (3)
- Profesión específica
- Uno de los siguientes: Guanteletes de malla de cadena, Guanteletes de malla guarnecida, Guanteletes de escamas
- Uno de los siguientes: Brazales de cuero sin curtir, Brazales de tirador, Brazales de cuero tachonado
- Uno de los siguientes: Guantes de tela, Guantes de lino, Guantes de terciopelo
Guía[editar]
Habla con la Sanadora Aviala y dirígete hacia donde la estrella verde marca el siguiente paso. Una vez en la instancia, ábrete paso entre los troles hasta llegar al ungüento y derrota a su cabecilla. Vuelve con Aviala y entonces dirígete a la Terraza del Soñador para reunirte con Caithe y Tiachren. Una vez ahí, entrégale el antídoto.
PNJs[editar]
Aliados[editar]
Bosque de Caledon[editar]
Terraza del Soñador[editar]
- Sylvari
- Caithe
- Sanadora Aine
- Sanador Glyndowr
- Tiachren
- Luminaria del ciclo del personaje:
Enemigos[editar]
Objetos[editar]
Diálogo[editar]
Bosque de Caledon[editar]
Correo recibido:
Caithe Una amistad herida Valiente, se requiere tu ayuda. Un caballero herido llamado Tiachren ha llegado hasta la Arboleda y se ha desmayado. Es un caso grave de envenenamiento con saviaponzoña, un terrible veneno utilizado únicamente por los sylvari de la desaparecida Corte de la Pesadilla. Si no le traemos el antídoto, morirá. Me gustaría ir a buscar la cura, pero temo que haya más ataques. Debo quedarme y defenderle. Valiente, necesito que vayas a ver a la sanadora Aviala, en la Aldea de Astorea, y que le pidas ayuda. Conoce el antídoto y puede que tenga un poco. Cuando lo consigas, vuelve rápidamente. La vida de este valiente caballero está en tus manos.—Caithe |
Cinemática con la Sanadora Aviala:
- Sanadora Aviala: Saludos, brote. Estás muy serio. ¿Cómo puedo alegrarte el día?
- <Nombre del personaje>: Tengo malas noticias. Han herido gravemente a un sylvari con un veneno llamado "saviaponzoña". Me han dicho que lo utiliza un malvado grupo llamado la Corte de la Pesadilla. Según Caithe, es posible que tengas un antídoto...
- Sanadora Aviala: ¡Es terrible! ¡La Corte de la Pesadilla es malvada! ¡Se han vuelto contra el Árbol Pálido! Les he visto usar venenos contra aquellos sylvari que se negaban a unirse a ellos.
- Sanadora Aviala: Ojalá pudiera ayudarte, pero les he dado lo que me quedaba a los Guardas de Verdeante de Caer. La Corte de la Pesadilla ha estado causando problemas allí.
- <Nombre del personaje>: Por favor. La carta de Caithe decía que los sylvari están desesperados.
- Sanadora Aviala: Existe una posibilidad, pero es problemática. Los troles cercanos también luchan contra la Corte de la Pesadilla y padecen los mismos venenos.
- Sanadora Aviala: He oído que los troles que hay más allá del linde sureste de la Floresta usan un ungüento para curar el veneno. Si tuviera un poco, podría usarlo para los sylvari.
- <Nombre del personaje>: Encontraré el ungüento y te lo traeré. Volveré pronto, sanadora.
Hablando otra vez con la Sanadora Aviala:
- Sanadora Aviala: ¿Tienes el ungüento de trol, <Nombre del personaje>?
- Tengo que hacerte una pregunta antes de recolectarlo.
- Desde luego. ¿Qué quieres saber?
- ¿Puedes contarme algo sobre los troles?
- Están dotados de cierta astucia brutal, pero además son crueles y territoriales.
- Interesante. ¿Puedo hacerte otra pregunta?
- Gracias por la información. Adiós.
- ¿Qué aspecto tiene el ungüento de trol?
- Es una especie de pasta de hojas de color verde... con un leve olor a podrido. Si miras con cuidado al suelo, la encontrarás.
- Gracias. ¿Puedo preguntarte otra cosa?
- Gracias por la información. Adiós.
- ¿Qué es un sanador?
- Nos encargamos de curar y dar forma a las cosas. Curamos las heridas y enfermedades de los sylvari y tratamos de mantener la tierra sana.
- Muy amable. ¿Puedo hacer otra pregunta?
- Gracias por la información. Adiós.
- No importa. Gracias por tu ayuda.
- Siento molestarte. Ahora me ocupo de eso.
La Floresta[editar]
Acercándote a los troles:
- Trol de la selva se burla de <Nombre del personaje>.
Interactuando con el Ungüento de trol:
- Ungüento de trol: Un nocivo montón de hojas espachurradas, raíces y hongos. Con suerte, este potingue es lo que los troles usan para curar el veneno.
- Raspa un poco encima de una hoja grande y envuélvelo.
- No tocar.
De vuelta a la Aldea de Astoria, hablando con la Sanadora Aviala:
- Sanadora Aviala: Ah, sí, modificamos un poco este ungüento trol y... ¡listo! Esto bastará para curar al caballero. ¡Llévaselo cuanto antes!
- Lo haré, sanadora. Gracias por tu ayuda.
Hablando con la Sanadora Aviala otra vez:
- Sanadora Aviala: Has hecho algo muy valiente por ese caballero, pimpollo. ¡Cuánta bondad!
- ¿Puedo hacerte una pregunta?
- Desde luego. ¿Qué quieres saber?
- ¿Qué más sabes sobre los troles? (misma respuesta que antes, ver arriba)
- ¿Por qué tienes esos moas?
- ¡Estas son mis mascotas, Olyviir y Myngoeh! Además de que son encantadores, me protegen aquí en el bosque. Esconde muchos peligros.
- No suena demasiado bien. ¿Puedo hacerte otra pregunta?
- Encantadoras, sí. Gracias.
- ¿Qué es un sanador? (misma respuesta que antes, ver arriba)
- Siento molestarte.
- Tú también has sido amable. Gracias por tu ayuda.
Terraza del Soñador[editar]
En acercarte a Caithe:
- Caithe: Rápido... ¡El antídoto! No aguantará mucho más.
- Caithe: Excelente. Yo me encargo de esto.
- Caithe: Está de regreso.
Cinemática después de que Caithe haya administrado el antídoto:
- Caithe: ¡Valiente! Me alegro de que hayas venido. Siento mi abrupta carta, pero sentí que esto era realmente importante.
- Caithe: ¿Te has fijado en el escudo del caballero? Lleva un símbolo que vi en tu Sueño: una luna creciente. Se supone que debes ayudarle.
- Caithe: Tranquilo, Tiachren. Estás en la Arboleda, entre amigos. Te envenenaron, pero te hemos curado. Cuéntanos qué pasó.
- Tiachren: Se la han llevado. Intenté luchar, pero mis heridas me superaron. ¡Por el Árbol, tengo que ayudarla!
- <Nombre del personaje>: Tiachren, espera. Estás demasiado débil como para luchar contra nadie. Cuéntanos qué pasó, y te ayudaremos. Lo prometo.
- Tiachren: La Corte de la Pesadilla raptó a mi amor, Ysvelta. Estamos junto al arroyo, en Verdeante de Caer, y antes de que me diese cuenta, se la habían llevado y me habían envenenado.
- Caithe: La Corte tiene muchos campamentos escondidos por todo el Bosque de Caledon. Ysvelta podría estar en cualquier sitio.
- Caithe: Hay una persona que podría saber. Durante la reciente batalla con la Corte, los Guardas tomaron a alguien como prisionero. Renvari.
- Caithe: Goza de cierto prestigio en la Corte de la Pesadilla. Intentarán liberarlo antes de que pueda revelarnos sus planes.
- <Nombre del personaje>: Entonces les daremos a los Guardas nuestro apoyo. Si Renvari sabe adónde se han llevado a Ysvelta, haremos que hable.
- Tiachren: Por favor, descubre dónde está. No puedo soportar seguir pensando qué es lo que le podrían estar haciendo a mi amor. Te lo ruego: date prisa.
Interactuando con el Escudo de la luna:
- Escudo de la luna: Este escudo me resulta familiar... Estaba en el Sueño.
- No tocar.
Hablando con Caithe:
- Caithe: Incluso con un antídoto potente, estos venenos cuestan de curar. Espero que Tiachren tenga un fuerte deseo de vivir.
- ¿Qué sabes de Tiachren e Ysvelta?
- Tiachren es un valeroso caballero e Ysvelta una hipnotizadora amable y con talento. El escudo de Tiachren fue un regalo de boda de su amada.
- Parece que los aprecias.
- Su amor es una inspiración para muchos de nosotros. El ataque de la Corte de la Pesadilla es de una crueldad deliberada, no solo hacia ellos sino hacia nuestra alegría por su felicidad.
- ¿Puedo preguntarte otra cosa?
- En efecto, es cruel. Tenemos que hacer todo lo que podamos para ayudar.
- ¿Puedo preguntarte otra cosa?
- Me entristece que estén separados. Intentaré remediarlo.
- ¿A qué te referías cuando dijiste que estaba destinado a ayudar a Tiachren?
- Soñaste con el símbolo de su escudo. Jugarás un papel en su vida. Sabremos lo que quiere decir... cuando llegue el momento.
- ¿Por qué lo atacó la Corte de la Pesadilla? (ver abajo)
- ¿Puedo preguntarte otra cosa?
- Comprendo.
- ¿Por qué lo atacó la Corte de la Pesadilla?
- Porque son malvados. Quizá tengan un plan, pero esto parece pura y simple malicia.
- ¿Puedo preguntarte otra cosa?
- Es una pena que exista tal maldad.
- ¿Qué sabes de la Corte de la Pesadilla?
- Sylvari malvados que rechazan la Tabla de Ventari y buscan dañar a la Madre Árbol.
- ¿Por qué alguien querría hacer algo así?
- Creen que la tabla no es más que una mentira que ha influenciado de forma negativa al Árbol. Desprecian las enseñanzas de otras razas e intentan imponernos la Pesadilla a los demás.
- "Entregarse a la Pesadilla" no suena bien.
- El Sueño tiene rincones oscuros. Recuerdos traumáticos, impulsos malignos, ese tipo de cosas. Para demostrar que se trata de nuestra verdadera naturaleza, se dedican a hacer el mal tanto como pueden para envenenar el Sueño.
- Es terrible. ¿Puedo hacerte otra pregunta?
- Qué horrible. ¡Los vigilaré bien de cerca!
- ¡Lechugas! Si han capturado a Ysvelta, ¿se la puede salvar? (ver abajo)
- No permitiremos que suceda. Lo prometo.
- Si la Corte de la Pesadilla tiene a Ysvelta, ¿aún se la puede salvar?
- No lo sé. Solo la recuerdo un poco. Es amable y compasiva. Eso ayuda. Si la encontramos a tiempo.
- ¿Puedo preguntarte otra cosa?
- Entonces debo apresurarme. ¡Adiós!
- ¿Cómo pudiste entrar de nuevo en el Sueño para ayudarme?
- La Madre Árbol me envió. Igual que el Ciervo Blanco, ella existe tanto aquí como en el Sueño. Pero, como estoy despierta, no pude hacer más.
- ¿Así que necesitabais que os ayudara?
- Exacto. Teníamos la esperanza de encontrar a alguien con alma de héroe. Y apareciste tú, <Nombre del personaje>.
- ¿Puedo hacer otra pregunta?
- Me alegra haber podido ayudar al Árbol Pálido.
- Es todo lo que necesito por ahora.
Hablando con Tiachren:
- Tiachren: Gracias, <Nombre del personaje>. Por favor, encuentra a Ysvelta. Te daré lo que quieras... pero tráela a casa sana y salva.
- Descansa. Debes curarte o no le harás bien a nadie.
- Sí, tienes razón. Es solo que temo tanto por ella. Mi pobre amada.
- ¿Qué puedes contarme sobre Ysvelta?
- Ella lo es todo para mí. Soñamos el uno con el otro y, cuando nuestras manos se tocaron, supe que su felicidad era mi única razón de ser.
- Tengo muchas ganas de conocerla. Adiós por ahora.
- Comprendo. Descansa y recobra las fuerzas.
- Tranquilízate. Tu amor querría que te recuperases.
- En eso tienes razón. Pensar en su sonrisa me reconforta el corazón. Gracias.
- ¿Qué puedes contarme sobre Ysvelta? (igual que arriba)
- Un placer, Tiachren. Ahora, descansa.
- Cálmate. Poco a poco iremos eliminando a los malvados que la secuestraron.
- La venganza es amarga pero me entregaré gustoso a ella si así vuelvo a ver a mi amada Ysvelta.
- ¿Qué puedes contarme sobre Ysvelta? (igual que arriba)
- ¡Esa es la idea! Recupérate y pronto nos reencontraremos.
- La curandera te atenderá y pronto estarás mejor. Adiós.
Hablando con el Sanador Glyndowr:
- Sanador Glyndowr: Me alegro de que te apresuraras. El veneno casi lo mata.
- ¿Cómo llegó Tiachren aquí?
- ¡Pura fuerza de voluntad! Estaba tan enfermo y vino de tan lejos. ¡Incluso mientras moría, nos suplicaba que socorriéramos a su amada!
- Tiene que ser maravillosa para inspirar tanto amor. ¿Puedo hacer otra pregunta?
- Interesante. Gracias.
- ¿Caithe estaba aquí cuando Tiachren llegó?
- Sí. Se alteró bastante. Vio su escudo e inmediatamente te envió una misiva. No sé por qué.
- Está muy... concentrada. ¿Puedo hacer otra pregunta?
- Interesante. Gracias.
- Entiendo. Espero que mejore pronto.
Hablando con la Sanadora Aine:
- Sanadora Aine: Muchas gracias por tu ayuda. Me rompe el corazón ver a Tiachren tan enfermo... ¡y sin su amada!
- ¿Conoces a Ysvelta?
- Sí. Es una criatura amable y bondadosa que siempre actúa desinteresadamente. Por favor, rescátala de la Corte de la Pesadilla.
- ¿Conoces bien a Tiachren?
- No te preocupes. La encontraremos.
- ¿Conoces bien a Tiachren?
- Es amigo mío. El amor que le profesa a Ysvelta es hermoso. Espero encontrar lo mismo algún día.
- Gracias. Espero que mejore pronto.
- Espero que mejore pronto.
Hablando con la Luminaria de tu ciclo:
- Para sylvari que han despertado durante el Ciclo del Amanecer:
- Aife: Hiciste bien. Escogiste el camino del honor incluso sin consejo. Estoy impresionada.
- ¿Cómo es ser de los Primogénitos, como tú y Caithe?
- Crecemos constantemente. Yo desperté junto con el sol en el primer amanecer de nuestra raza. Soy arquera y viajera, pero ahora permanezco aquí para ayudar a otros.
- ¿Has viajado mucho?
- Oh, sí: Arco del León, los Páramos de Maguuma, el gran desierto... El mundo es mayor de lo que puedas soñar, valiente.
- Qué maravilloso. ¿Puedo hacer otra pregunta?
- Fascinante. Gracias, primogénita.
- Gracias por responder a mis preguntas.
- ¿Qué haces aquí, primogénita? ¿Conoces a Tiachren?
- No. Tan solo me ofrecí para vigilarlo. Caithe te quería a ti y solo a ti. Ha sido muy insistente.
- Seguro que no pretendía ofenderte. Si me disculpas...
- ¿Puedes contarme más sobre el ciclo del amanecer?
- Nosotros despertamos durante las primeras horas de la mañana. Somos diplomáticos, trotamundos y buscadores. Eres de nuestro ciclo, valiente.
- Me alegra ser miembro del amanecer. ¿Puedo hacer otra pregunta?
- Eso explica mi afán por viajar. Gracias.
- ¿Qué hay de los demás ciclos?
- ¿Mediodía, noche y anochecer? Cada uno de ellos tiene sus puntos fuertes e intereses.
- Qué curioso. ¿Puedo hacer otra pregunta?
- Gracias por la explicación.
- ¿Por qué la hora de nuestro nacimiento es tan importante?
- Los Sueños cambian con las horas. El ciclo de alguien nos muestra sus puntos fuertes.
- Muy interesante. ¿Puedo hacer otra pregunta?
- Gracias por la información, primogénita.
- Gracias, primogénita.
- Para sylvari que han despertado durante el Ciclo del Mediodía:
- Niamh: Hiciste bien. Luchaste duro y sin rendirte. Estoy impresionado.
- ¿Cómo es ser de los Primogénitos, como tú y Caithe?
- Somos visionarios. Yo desperté en el cénit del primer día de nuestra raza. Soy una guerrera y una defensora. Yo fundé los Guardas.
- He visto a los Guardas en la Arboleda. ¿Puedes contarme más sobre ellos?
- Son compañeros honorables que protegen la Arboleda de cualquiera que intente dañar a los sylvari o al Árbol Pálido.
- Maravilloso. ¿Puedo hacer otra pregunta?
- Fascinante. Gracias, primogénita.
- Gracias por responder a mis preguntas.
- ¿Estás aquí porque conoces a Tiachren?
- No. Tan solo me ofrecí para vigilarlo. Caithe te quería a ti y solo a ti. Ha sido muy insistente.
- Seguro que no pretendía ofenderte. Si me disculpas...
- ¿Puedes contarme más sobre el ciclo del mediodía?
- Nosotros despertamos durante el calor del día. Somos aventureros, temerarios y soldados. Eres de nuestro ciclo, valiente.
- Me alegra ser miembro del ciclo del mediodía. ¿Puedo hacer otra pregunta? [sic]
- ¡Por eso me encanta explorar! Gracias, Niamh.
- ¿Qué hay de los demás ciclos?
- Amanecer, noche y anochecer. Cada uno de ellos tiene sus puntos fuertes e intereses.
- Qué curioso. ¿Puedo hacer otra pregunta?
- Gracias por la explicación.
- ¿Por qué la hora de nuestro nacimiento es tan importante?
- Los Sueños cambian con las horas. El ciclo de alguien nos muestra sus puntos fuertes.
- Muy interesante. ¿Puedo hacer otra pregunta?
- Gracias por la información, primogénita.
- Gracias, primogénita.
- Para sylvari que han despertado durante el Ciclo del Crepúsculo:
- Kahedins: Hiciste bien. Escogiste el camino del honor incluso sin consejo. Estoy impresionado.
- ¿Cómo es ser de los Primogénitos, como tú y Caithe?
- Siempre nos estamos adaptando. Yo desperté mientras el sol se ponía para nuestra raza por primera vez. Soy arquitecto y un erudito. Yo moldeé la Arboleda a la sombra del Árbol Pálido.
- ¿A qué te refieres con que tú moldeaste la Arboleda?
- Soy semillero, aquel que se dedica a hacer crecer casas y caminos. Empecé moldeando la Arboleda y he supervisado su crecimiento desde entonces.
- Maravilloso. ¿Puedo hacer otra pregunta?
- Fascinante. Gracias, primogénita.
- Gracias por responder a mis preguntas.
- ¿Qué haces aquí, primogénito? ¿Conoces a Tiachren?
- No. Tan solo me ofrecí para vigilarlo. Caithe te quería a ti y solo a ti. Ha sido muy insistente.
- Seguro que no pretendía ofenderte. Si me disculpas...
- ¿Puedes contarme más sobre el ciclo del anochecer?
- Nosotros despertamos durante el atardecer. Somos artistas, artesanos y faranduleros. Eres de nuestro ciclo, valiente.
- Me alegra ser miembro del anochecer. ¿Puedo hacer otra pregunta?
- Estoy aquí para contemplar la belleza del mundo. Gracias.
- ¿Qué hay de los demás ciclos?
- ¿Mediodía, noche y amanecer? Cada uno de ellos tiene sus puntos fuertes e intereses.
- Qué curioso. ¿Puedo hacer otra pregunta?
- Gracias por la explicación.
- ¿Por qué la hora de nuestro nacimiento es tan importante?
- Los Sueños cambian con las horas. El ciclo de alguien nos muestra sus puntos fuertes.
- Muy interesante. ¿Puedo hacer otra pregunta?
- Gracias por la información, primogénita.
- Gracias, primogénito.
- Para sylvari que han despertado durante el Ciclo de la Noche:
- Malomedies: Hiciste bien. Luchaste duro y sin rendirte. Estoy impresionado.
- ¿Cómo es ser de los Primogénitos, como tú y Caithe?
- Siempre estamos aprendiendo. Yo desperté durante la primera noche de la raza sylvari. Soy filósofo, matemático y vigilante del mundo.
- ¿A qué te refieres con vigilante del mundo?
- Predigo el curso de los acontecimientos. Por ejemplo, puedo predecir que serás una traerás[sic] el cambio a Tyria.
- Maravilloso. ¿Puedo hacer otra pregunta?
- Fascinante. Gracias, primogénita.
- Gracias por responder a mis preguntas.
- ¿Estás aquí porque conoces a Tiachren?
- No. Tan solo me ofrecí para vigilarlo. Caithe te quería a ti y solo a ti. Ha sido muy insistente.
- Seguro que no pretendía ofenderte. Si me disculpas...
- ¿Puedes contarme más sobre el ciclo de la noche?
- Nosotros despertamos en la oscuridad de la noche. Somos matemáticos, rufianes y centinelas. Eres de nuestro ciclo, valiente.
- Me alegra ser miembro del ciclo de la noche. ¿Puedo hacer otra pregunta? [sic]
- Ahora entiendo por qué me interesa tanto ver mundo.
- ¿Qué hay de los demás ciclos?
- Mediodía, amanecer y anochecer. Cada uno de ellos tiene sus puntos fuertes e intereses.
- Qué curioso. ¿Puedo hacer otra pregunta?
- Gracias por la explicación.
- ¿Por qué la hora de nuestro nacimiento es tan importante?
- Los Sueños cambian con las horas. El ciclo de alguien nos muestra sus puntos fuertes.
- Muy interesante. ¿Puedo hacer otra pregunta?
- Gracias por la información, primogénita.
- Gracias, primogénito.