La dedicación total de los Exaltados
La dedicación total de los Exaltados es un relato de Scott McGough.
Texto[editar]
En las salvajes profundidades de Maguuma, bajo un follaje tan denso que ni siquiera la luz del sol puede abrirse paso, se encuentra una resplandeciente ciudad dorada llamada Tarir. Los Olvidados, una raza antigua conocida por su poderosa magia y misterios aún más poderosos, establecieron esta ciudad con un objetivo noble y glorioso. Los Olvidados sabían que no podrían cumplir con su propósito sin ayuda, así que crearon una raza de brillantes ayudantes mágicos para llevar a cabo sus planes: los Exaltados.
Un plan elaborado hace mucho
Para entender quiénes son los Exaltados, antes debéis saber quién era la dragona Glint. El dragón anciano Kralkatorrik creó a Glint para que fuera su campeona, pero su conexión con las razas mortales de Tyria la llevó a romper el vínculo que tenía con su amo y a proteger a todas las razas conscientes que pudiera de la amenaza del dragón anciano. Estos actos desinteresados le costaron la vida a Glint cuando Kralkatorrik se alzó en la era moderna. Sin embargo, antes de morir, Glint se aseguró de que las razas conscientes de Tyria sobrevivieran a Kralkatorrik y al resto de dragones ancianos. Como contaba con el don de la adivinación y la ayuda de los Olvidados, que fueron sus ayudantes incondicionales, Glint preparó un legado que continuaría con su magnífico trabajo tras su muerte.
Hace unos 300 años y siguiendo las instrucciones de Glint, los Olvidados buscaron voluntarios humanos que también compartieran el sueño de Glint de garantizar un futuro de paz. Tras una serie de rigurosas pruebas, los voluntarios más dignos se sometieron a un ritual para convertir sus cuerpos en energía mágica pura que luego quedaría protegida por unas armaduras de metal dorado. A partir de este momento, pasaron a ser Exaltados.
Como son seres hechos de energía sobrenatural, los Exaltados tienen un talento para la magia mucho más avanzado que cuando eran de carne y hueso. También son inmortales a todos los efectos: no envejecen y son muy resistentes. Sin embargo, se les puede matar usando la violencia o drenando su magia esencial. Los Exaltados conservan sus nombres, personalidades y recuerdos del pasado, pero no necesitan comer ni dormir, lo que les permite dedicar toda su atención y energía a sus responsabilidades.
Trabajar para un mañana mejor
Los Exaltados creen firmemente en el mensaje de esperanza y paz de Glint y están entregados por completo a preservar su legado. Cuando eran humanos, literalmente dieron su vida para convertirse en custodios de un futuro más próspero. Es una tarea ardua, pero su entrenamiento y el proceso que los convirtió en Exaltados los prepararon de forma adecuada para las nobles responsabilidades que juraron desempeñar.
Hay tres tipos básicos de Exaltados, divididos según el tipo de trabajo para el que fueron creados: bruñidores, paladines y sabios. Aunque los Exaltados buscan un futuro pacífico y armonioso, no dudan en combatir cuando llega el momento.
Los bruñidores crean y mantienen la infraestructura de Tarir dando forma e infundiendo magia pura en los edificios, calles y dispositivos complejos. Son los principales responsables de mantener Tarir en funcionamiento, incluidos los formidables escudos mágicos que la defienden de las amenazas externas. También se encargan de los puestos vigías de Tarir, una serie de lugares remotos ubicados estratégicamente para defender la ciudad y observar sus alrededores. Los bruñidores exaltados pueden invocar muros temporales en combate para proteger a sus camaradas y a ellos mismos. También pueden crear pozos de energía que curan a sus aliados.
Los paladines son los miembros de los Exaltados especializados en el combate: son los centinelas, soldados y defensores tanto de Tarir como del legado de Glint. Patrullan la ciudad y los puestos vigía para proteger su hogar de los mordrem y otras criaturas de la selva. Los paladines normalmente trabajan en parejas con bruñidores de forma duradera para defender de dos en dos un puesto vigía específico. Los paladines pueden crear armas, tanto de cuerpo a cuerpo como de a distancia, a partir de energía mágica o usarla como escudo contra los ataques que reciben.
Los sabios son los lanzadores de hechizos de los Exaltados y se dedican a concentrar y dirigir las cantidades ingentes de magia que Tarir necesita para funcionar a pleno rendimiento. También se aseguran de que haya un flujo continuo de energía arcana por Tarir y los puestos vigías para que otros Exaltados la usen. La tarea más importante de los sabios es la creación y el mantenimiento del sistema de teletransporte basado en runas que permite viajar a ubicaciones específicas dentro de la ciudad así como hacia y desde los puestos vigía. Los sabios también emplean un ataque de rayo que, aunque no hace mucho daño, mantiene al enemigo a raya.
Hora de despertar
Una vez que Tarir quedó completada y lista para recibir el legado de Glint, los Exaltados entraron en un estado de latencia para conservar sus recursos mágicos hasta que los necesitaran. Entonces, después de que el huevo de Glint comenzara a mostrar signos de que se abriría pronto y que el maestro de la Paz partiera para devolverlo a la fantástica ciudad dorada, Tarir y los Exaltados escucharon la llamada. En ese momento, la magia comenzó a fluir: los bruñidores, paladines y sabios despertaron para volver a sus responsabilidades y tanto los Exaltados como su ciudad se prepararon para empezar la tarea para la que habían sido creados.
Por desgracia, Scarlet Briar ya había despertado a Mordremoth, y el dragón de la selva ya había comenzado la invasión de Maguuma. Los Exaltados descubrieron que la selva era incluso más peligrosa de lo que recordaban y que los aliados que tenían entre los habitantes de la selva habían desaparecido, quizás para siempre. Lo peor de todo es que se toparon con una implacable horda de siervos del dragón que estaba dispuesta a absorber toda la magia que pudieran para su amo. Los Exaltados veían con desidia y horror cómo Mordremoth destruía a la flota del Pacto y algunos hasta se preguntaban si su prestigioso propósito estaba destinado a fracasar justo cuando estaba comenzando.
¿Se unirán los Exaltados para rechazar a los mordrem y hacer que Tarir sea el refugio seguro que se pretendía? ¿Será el legado de Glint la salvación por la que ella misma, los Olvidados y los Exaltados dieron tanto?
En Guild Wars 2: Heart of Thorns™, no solo podréis ver cómo los Exaltados lidian con estos y otros desafíos, sino que también tomaréis un papel activo en el destino final del legado de Glint y de las nobles almas que velan por él.
Enlaces externos[editar]
- La dedicación total de los Exaltados, GuildWars2.com