Robo de secretos
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Robo de secretos
- Año
- 1325 d.É
- Argumento
- Historia personal
- Capítulo
- Neófito de la orden
- Localización
- Foro del Comerciante
(Arco del León)
Campos de la Abundancia
(Campos de Gendarran) - Nivel
- 40
- Orden
Orden de los Susurros- Precedido por
- Preparativos
- Seguido por
- Arriba, abajo, al centro y... ¡pa dentro!
- API
- 253
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|
Pantalla de carga al reunirte con tu mentor del Priorato 
Pantalla de carga en Campos de la Abundancia |
Robo de secretos es parte de la historia personal para los personajes que han escogido unirse a la Orden de los Susurros.
Objetivos[editar]
- Viaja a Arco del León.
Reúnete con la Orden de los Susurros.
- Mira tu correo.
Ponte en contacto con la Orden de los Susurros en Arco del León.
- Habla con tu contacto de la orden.
- Habla con Riel Aguaoscura.
Infíltrate en el Caserío Manzarrincón.
- Reúnete con Tybalt a las afueras del Caserío Manzarrincón.
- (Interroga a los lugareños sobre Demmi Piedramazo.)
- Pregunta a los lugareños para encontrar a Demmi Piedramazo.
- (Habla con la Guardia del Ministerio en la posada.)
- Habla con los guardias del Ministerio en la taberna.
- Sube sin que te vean y espía a la Guardia del Ministerio.
- Crea una distracción para hacer que el comandante del Ministerio se marche.
- Registra la habitación del comandante Landon situada en el piso superior.
- (Derrota a las sílfides invocadas.)
- Derrota a las criaturas creadas por la trampa mágica.
Recompensas[editar]
- Todas las profesiones
Saco de botín (2)
- Profesión específica
Uno de los siguientes: 
Camisote de cuidador, Armadura de asesino, Armadura de incondicional
Uno de los siguientes: Chaqueta de cuidador, Chaleco de asesino, 
Jubón de incondicional
Uno de los siguientes: Abrigo de cuidador, 
Abrigo de asesino, 
Abrigo de incondicional
Guía[editar]
Es una misión bastante simple: sigue los marcadores de la misión. Tras leer la carta del comandante, aparecen dos chispas que os atacan y debes derrotar.
PNJs[editar]
Aliados[editar]
Foro del Comerciante[editar]
- Iluminado Tybalt Zarpazurda (Vendedor de manzanas misterioso)
- Soldado
- Soldado de la Legión de Hierro
- Erudito
- Instructor guardián genérico
- Instructora guerrera genérica
- Instructor ladrón genérico
- Noble
- Riel Aguaoscura
- Teniente de la Guardia del León
- Varios
Caserío Manzarrincón[editar]
- Animales
- Asura
- Charr
- Iluminado Tybalt Zarpazurda
- Humanos
- Comandante del Ministerio Landon
- Guardia del Ministerio
- Jefe de la manada de la Guardia del Ministerio
- Lavandera
- Posadero Bagley
- Sargento del Ministerio
- Tendero
- Norn
- Varios
- Guardia del león
Enemigos[editar]
Objetos[editar]
Diálogo[editar]
Reunión con mi mentor[editar]
Correo recibido:
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Una amistad interesada Manzanas a la venta Hola, viajero. No me conoces, pero me han dado a entender que te interesan las manzanas. Podría decirse que yo soy un gourmet de las manzanas. Creo que comer fruta fresca es muy bueno para el oído. ¡Una manzana al día y oirás a los Susurros desde la lejanía! En cualquier caso, si quieres pedir una fanega de manzanas, esta es la dirección de mi frutero favorito en Arco del León. Te prestará toda la ayuda que necesites. —Saludos cordiales, un amigo P.D.: ¡Destruye esta carta! No sé, cómetela o lo que sea. Usa la imaginación. |
Acercándote a tu contacto:
- Vendedor de manzanas misterioso: ¡Manzanas! ¡Se venden manzanas! ¡A la rica manzana! ¡Psst! Son tan silenciosas... ¡Se diría que susurran!
- Vendedor de manzanas misterioso hace señas a <Nombre del personaje>.
- Vendedor de manzanas misterioso: ¿Sabes qué me comería ahora mismo? ¡Una manzana roja y jugosa!
- Vendedor de manzanas misterioso: ¡Manzanas, no peras! ¡Aquí no es ahí! ¿Quieres comprar una manzana?
- Vendedor de manzanas misterioso señala a <Nombre del personaje>.
- Vendedor de manzanas misterioso: ¡Toc toc! ¿Quién es? ¡Tú! Comprando una manzana.
Cinemática:
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Psst. Eh, hola. ¿Puedo ofrecerte una manzana?
- <Nombre del personaje>: Estoy buscando a mi contacto. Un miembro de la Or...
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: ¡Ay! ¡Ssssh! ¡Manzanas a la venta! ¡Solo manzanas a la venta!
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: ¿Qué parte de "sociedad secreta" no te explicaron? Baja la voz, iniciado, y finge que compras una manzana.
- <Nombre del personaje>: ¡Lo siento! Eh... Dame esa manzana. Esa de ahí.
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Me llamo Tybalt, iluminado de la Orden de los... Ya-sabes-qué. Mi trabajo es entrenarte para servir a la Orden.
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Se supone que debo averiguar si eres de fiar, y si lo eres... Bueno, se te proporcionará más información.
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: A un montón de gente le encantaría conocer los secretos que nuestra orden consigue sobre los dragones. Algunas veces, con motivos oscuros.
- <Nombre del personaje>: Tiene sentido. Me puedes poner cualquier prueba, Tybalt. Te mostraré lo que valgo.
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Lo primero es lo primero. Se nos ha encomendado una misión. ¿Estás preparado para ello, iniciado?
- <Nombre del personaje>: ¿No me vas a decir qué es?
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: ¡Bah! No en Arco del León; aquí hay oídos por todas partes. Reúnete conmigo en el Caserío Manzarrincón y allí te proporcionaré la información.
Después de que Tybalt se va, Riel Aguaoscura aparece:
- Riel Aguaoscura: Antes de que te vayas con Tybalt, ven a hablar conmigo, iniciado.
- Riel Aguaoscura: Me llamo Riel y soy la principal espía de la Orden en Arco del León.
- Riel Aguaoscura: Los Preceptores me envían para darte la bienvenida antes de que comience tu primera misión.
- Riel Aguaoscura: Tienes derecho a saber los peligros a los que te enfrentarás...
Cinemática al hablar con Riel Aguaoscura:
- Bienvenido, iniciado. Sí, sabemos quién eres. Te hemos estado vigilando.
- Te nos unes aunque el destino de las naciones pende de un hilo. Solo la Orden de los Susurros se interpone entre la civilización y la ruina.
- Los dragones se alzan en todas las naciones.
- Devorarán el mundo.
- Si no los detenemos, convertirán Tyria en una cáscara quemada; un caparazón roto.
- Aunque hayas elegido unirte a la Orden de los Susurros, tendrás que ganarte nuestra confianza. Es la hora de demostrar tu valía.
- No importa la procedencia de los dragones ni por qué se despertaron.
- Los secretos descubiertos nos ayudarán a devolverlos al infierno.
- Bienvenido a la Orden de los Susurros.
Hablando con Riel tras la cinemática:
- Riel Aguaoscura: Habla rápido, iniciado. Me esperan en otra parte... y a ti también.
Perdona, ¿pero quién eres?
- Me llamo Riel Aguaoscura. Soy el agente que el Consejo del Barco ha enviado a Arco del León. Observo a los nuevos iniciados y ofrezco ayuda siempre que puedo.
- ¿Qué sabes sobre mi misión con Tybalt? (Igual que "¿Puedes contarme algo sobre mi misión con Tybalt?")
Encantado de conocerte.
- ¿Puedes contarme algo sobre mi misión con Tybalt?
- Los detalles son confidenciales, lo siento. Tybalt ha recibido órdenes directas del maestro de los Susurros, así que debe de ser importante.
- ¿El maestro de los Susurros? ¿Quién es?
- El maestro de los Susurros es el líder de la Orden. Solo los agentes de más nivel conocen su identidad.
- Lo pillo. Gracias por la información.
- Entonces, será mejor que vaya corriendo. Gracias.
- ¿Por qué tanto secreto? ¿Tan importante es esta misión?
- La Orden de los Susurros es una organización secreta, iniciado. Acostúmbrate. Y sí, he oído que la misión es de vital importancia.
- Entiendo. Gracias por ponerme al corriente.
- Entendido. Cuídate.
Caserío Manzarrincón[editar]
Acercándote a Tybalt:
- Helena: Hola.
- Helena saluda con la mano a <Nombre del personaje>.
Cinemática al hablar con Tybalt:
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: ¡Eh, iniciado! Ojalá hubiéramos podido charlar en aquella taberna de Arco del León... Bebida gratis, montones de muchachas bonitas para entretener a un ingeniero hecho polvo...
- <Nombre del personaje>: Quizá la próxima vez. Incluso te invitaré a un trago de algo que te gustará. Sidra de manzana, ¿verdad?
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: ¡Ja! Muy buena. Sea como sea, esta es la situación. Esto es... ¡Kryta! La mayor parte de la política de Kryta gira en torno al tira y afloja entre el Ministerio y la reina.
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: El ministro Caudecus desea arrebatarle el trono a la reina Jennah. Caudecus no percibe a los dragones como una amenaza. Quiere Kryta para él solo.
- <Nombre del personaje>: Eso quiere decir que estamos del lado de la reina, ¿no?
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Tienes toda la razón. La reina Jennah está negociando un trato con los charr. Ella apoya a Arco del León... A la Orden le gusta tenerla en el poder.
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Aquí es donde el tema se pone interesante: la hija del ministro Caudecus, Demmi, se ha puesto en contacto con la Orden de los Susurros. Parece ser que tiene problemas en casa.
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Demmi Piedramazo está ofreciendo información detallada sobre los oscuros tejemanejes de su padre a cambio de asilo en la Orden.
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: El problema es que la Orden perdió el contacto con Demmi en algún lugar entre Linde de la Divinidad y el Caserío Manzarrincón. Nuestro trabajo es localizarla.
- <Nombre del personaje>: Tiene sentido. Echemos un vistazo y veamos qué podemos averiguar.
Hablando con Tybalt:
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Bueno, <Nombre del personaje>, ¿estás listo? La primera misión empieza con un cuestionario. ¿Qué crees que deberíamos hacer?
- Debe de haber algún guardia del león en la ciudad. Intentaré sacarles respuestas. (si aún no has interrogado ningún guardia del león)
- Buena idea. Tú delante.
- Suena bien.
- Hablaré con la lavandera local. Puede que sepa algún cotilleo. (si aún no has interrogado ninguna lavandera)
- Buena idea. Tú delante.
- Suena bien.
- Estas personas conocen a Demmi. Veré si alguien más la ha visto últimamente, quizás algún tendero. (si aún no has interrogado ningún tendero)
- Buena idea. Tú delante.
- Suena bien.
- ¿Dices que Demmi contactó con la Orden de los Susurros desde esta aldea? Puede que el mensajero recuerde algo. (si aún no has interrogado ningún mensajero)
- Buena idea. Tú delante.
- Suena bien.
- Deja que piense en esto un momento. Algo se me ocurrirá.
Speaking with Helena:
- Helena: Ese amigo tuyo es un charr muy extraño. ¡Rechazó mi oferta de realizar un combate rápido para demostrar su fuerza! ¿A qué viene eso?
- ¿Tybalt? Me sorprende que se negara.
- Bueno, tampoco es que me ofendiera. Puede que venga a retarme en otro momento. Parecía un poco ocupado.
- Puede que en otra ocasión.
- Lo cierto es que es un charr muy diferente.
Interrogando a los lugareños:
- Guardia del león: Buenas noches, viajero. ¿Te puedo ayudar en algo?
¿Quiénes son todos estos guardias del Ministerio? ¿No deberían estar en Kryta? (solo al hablar por primera vez)
- Su comandante ha aparecido exigiendo toda la posada para sus tropas. Espero que piensen pagar por su estancia.
- Gracias por la información.
- Ahora no, gracias.
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: ¿Se hospedan en la posada? Eso podría conllevar algo de investigación.
- Lavandera: ¿Qué quieres, forastero?
- Se supone que había quedado aquí con una chica bastante guapa de Kryta... ¿La has visto?
- ¿Una jovencita guapa? Podría ser. ¿Cómo era?
- Puede que llevara ropa de campo. Algo rústico.
- Hmm. No, no me suena. La mayoría de las chicas que vienen son de ciudad, no de campo.
- De acuerdo. Volveré luego.
- Es de Linde de la Divinidad, así que seguramente lleve ropa buena.
- ¡Ah, sí! Recuerdo haber visto a una chica así hace unos días. Aunque no hablé mucho con ella. Lamento no poder ayudar.
- Muchas gracias, señora. Me alegra saber que al menos llegó aquí.
- Lo siento, no importa. Tengo que irme.
- Nada, gracias.
- (hablando otra vez)
- Lavandera: Mucha suerte buscando a tu amiga.
- Gracias.
- Tendero: ¡Saludos, <Raza del personaje>! Tengo alimentos deliciosos para todas las formas de vida. ¿Qué puedo ofrecerte?
- Estoy buscando a una amiga, una mujer joven de fuera. ¿La has visto?
- ¿Una mujer joven de fuera? Suelo recordar a la gente por sus compras. ¿Alguna idea de qué puede haber comprado?
- Seguramente provisiones: carne ahumada o galletas crujientes. Cosas que puedan durar en un viaje.
- Provisiones. Hmm, no. Lo siento, amigo. No se me ocurre nada.
- Gracias por tu ayuda.
- Es de la ciudad, así que también habrá comprado fruta fresca, quesos, cosas así.
- Cosas caras, ¿eh? Ahora me acuerdo. Una señorita adorable. Sí, estuvo aquí hace unos días.
- ¿Sabes adónde ha ido?
- Lo siento. Casi no hablaba. Parecía algo tímida. Se marchó de la ciudad justo antes de que llegaran los del ministerio.
- Me alegro saberlo. Gracias.
- Luego hablo más contigo. Gracias.
- Nada por ahora, muchas gracias.
- (hablando otra vez)
- Tendero: Espero que tu amiga aparezca pronto. ¿Hay algo que pueda hacer por ti mientras tanto?
- No, gracias.
- Mensajero: ¡Saludos, amigo! ¿Qué puedo hacer por ti?
- ¿Has recibido algún mensaje extraño últimamente?
- ¿Extraña, dices? Bueno... había una carta certificada para el comandante de la Guardia del Ministerio, pero no puedo hablar de eso.
- ¿El Ministerio no tiene sus propios mensajeros?
- Normalmente sí. Parece raro, ¿verdad? Supongo que alguien no quería registrar el uso de un mensajero.
- Qué interesante. Gracias.
- Ajá. Gracias.
- Estoy buscando a una amiga. ¿Puedes mirar si me ha dejado un mensaje?
- Un momento, <Nombre del personaje>... No, no veo nada para ti. Lo siento.
- ¿Ha llegado alguna carta inusual? (igual que arriba)
- Ah, bueno. Gracias por tu tiempo.
- Por ahora no, gracias.
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Me pregunto quién envía cartas al comandante. Me encantaría averiguarlo.
- (hablando otra vez)
- Mensajero: Hola de nuevo. ¿Puedo ayudarte en algo, <Nombre del personaje>?
- Estoy buscando a una amiga. ¿Puedes mirar si me ha dejado un mensaje?
- Un momento, <Nombre del personaje>... No, no veo nada para ti. Lo siento.
- Ah, bueno. Gracias por tu tiempo.
- Por ahora no, gracias.
Hablando con otros PNJs:
- Jefe de la manada de la Guardia del Ministerio: ¿Eh? ¿Querías algo? ¡No oigo muy bien, así que habla más alto!
- ¿Quién eres? ¿Qué haces aquí?
- Se supone que debo vigilar la carga y los animales, pero me estás estorbando.
- Entendido, ¿pero qué se supone que estás vigilando?
- Ni idea, la verdad. Es el trabajo más fácil que he tenido, lo juro.
- Je. Entonces, te dejo.
- Perdona. Adiós.
- Mis disculpas. Te dejo en paz.
- Toro de carga de la Guardia del Ministerio: Estos animales pertenecen a la Guardia del Ministerio.
- Dejarlos tranquilos... por ahora.
Al caminar a través del pueblo:
- Guardia del león (1): Por las plumas del Cuervo, ¡los soldados del Ministerio son memos!
- Guardia del león (2): ¿Ese Comandante que tienen? Dijo que la posada era poca cosa para él. Y se quedó con toda la planta superior.
- Guardia del león (1): Si esa es su actitud, esconde la cerveza. ¡También es poca cosa para mí!
Cinemática tras hablar con todos los lugareños:
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Tienes don de gentes. Bien. Si los exprimes un poco, los aldeanos soltarán información.
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: De modo que Demmi estuvo aquí con unos amigos y después se esfumó. La Guardia del Ministerio llegó justo después de que ella desapareciese.
- <Nombre del personaje>: Tiene sentido que su padre, un ministro poderoso, enviase a la Guardia a buscarla. Pero todavía está aquí, lo que significa que aún no ha encontrado a Demmi.
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Mmm. También sabemos que el comandante de la Guardia del Ministerio estaba enfadado por el mensaje de un remitente desconocido.
- <Nombre del personaje>:: La Guardia tiene respuestas que ignoramos. Es hora de averiguar qué sabe.
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Todos están en la taberna. Si hacemos que se pongan a beber y charlar, soltarán las manzanas. En marcha.
Tras la cinemática:
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Demmi ha desaparecido antes de que llegara el Ministerio. Tenemos que averiguar más.
Hablando con Tybalt después de la cinemática:
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Bueno, no sacaremos más de los aldeanos. Deberíamos hablar con alguno de los guardias del Ministerio... Pero ¿con quién?
- Conseguiré algunas respuestas de ese tipo duro del Ministerio. (si aún no has interrogado este guardia)
- Entendido. Te cubro las espaldas.
- Gracias.
- Me juego una bebida o tres a que consigo que uno nos cuente algo útil. (si aún no has interrogado este guardia)
- Entendido. Te cubro las espaldas.
- Gracias.
- Mira esto. Los encandilaré. No se darán cuenta de lo que van a decir. (si aún no has interrogado este guardia)
- Entendido. Te cubro las espaldas.
- Gracias.
- Encontraré a algún recluta ingenuo al que se le vaya la lengua. (si aún no has interrogado este guardia)
- Entendido. Te cubro las espaldas.
- Gracias.
- Espera. Necesito un momento para decidir qué hacer.
Hablando con los PNJs:
- Posadero Bagley: ¿Qué puedo hacer por ti, forastero?
- Por ahora no, gracias.
- Sargento del Ministerio: No hablo con personal que no pertenece al Ministerio, civil. Mete la nariz en mis asuntos y te la estampo contra el suelo.
- Me voy.
Interrogando a los guardias:
- ("tipo duro")
- Guardia del Ministerio (1): Lárgate, hierbajo.
- Qué imbécil más cargante. Sí, ya me has oído, imbécil cargante.
- De acuerdo...
- ("una bebida o tres")
- Guardia del Ministerio (2): Entonces, ¿qué es todo esto? ¿Algún problema? ¿Necesitas a la mundialmente famosa Guardia del Ministerio de Kryta?
- ¿No sois de la Guardia del León?
- ¡No! Hacemos trabajos de verdad. Servimos a los ministros como... Bueno, no puedo hablar de él. Servimos a Kryta. ¡Por Kryta!
- Cierto. Kryta... y cierto ministro, ¿verdad?
- Eh, yo no he dicho eso. ¿Cierto? Pues no es un ministro... Oh, ugh. Estoy hablando demasiado. Creo que tengo que salir un momento...
- Creo que es todo lo que voy a sacar de ti.
- Claro, por Kryta.
- ¡Mira ahí! ¡Es la reina Jennah!
- ("recluta ingenuo")
- Guardia del Ministerio (4): Hola. ¿Eres de la Guardia del León?
- Eh... ¡Sí! Claro que sí. Y tú eres de la Guardia del Ministerio, ¿verdad?
- ¡Sí! Bueno, debo decir que no llevo mucho tiempo en el cuerpo, ¡pero sí que lo soy!
- Y dime... ¿Qué te trae hasta aquí?
- ¡Una misión de rescate! Qué noble. Hemos venido para rescatar a una bella dama de las garras de unos... Uy. Se supone que no debo contárselo a nadie.
- Vamos. Los dos somos guardias. Puedes confiar en mí.
- Me gustaría, pero no quiero meterme en problemas.
- Está bien. Avísame si puedo ayudar en algo.
- Comprendo. Cuídate.
- Hablemos luego, chico.
- Hablemos luego, chico.
- ("Los encandilaré.")
- Guardia del Ministerio (3): ¿Qué pasa contigo?
- Oye, solo quería saludar.
- Hola. Y ahora, lárgate.
- Parece que alguien se ha levantado con el pie izquierdo.
- Eres de la Guardia del Ministerio, ¿verdad? Parecéis muy orgullosos y entregados.
- Pues sí. Nos enfrentaremos a lo que haga falta. ¡Esos piratas no me dan miedo!
- ¿Piratas? ¿Qué piratas?
- ¿Piratas? Yo no... Da igual, lárgate de aquí.
- De acuerdo entonces.
- Ese es el espíritu.
- Nada. Siento molestarte.
Tras obtener información de un guardia:
- Guardia del Ministerio (1): Lárgate, hierbajo.
- De acuerdo...
- Guardia del Ministerio (3): No voy a decir nada más, forastero. Vete a beber a otra parte.
- Eso bastará.
- Guardia del Ministerio (4): Perdona, estoy ocupado.
- No pasa nada.
Cinemática tras recopilar información de todos los Guardias del Ministerio:
- Sargento del Ministerio: ¡Atención! ¡Ponte firme, soldado!
- Sargento del Ministerio: ¡Tú! Arriba, a paso ligero. ¡Pero ya!
- Guardia del Ministerio: ¡Sí, señora!
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Sigamos a ese idiota, a ver qué oímos. Igual sacamos algo en claro.
Hablando con Tybalt antes de escuchar a hurtadillas:
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Ahora ese recluta está en problemas... Seguro que le van a dar una buena regañina. ¡Vamos a colarnos cuando entren y escucharemos lo que dicen!
- Me parece una buena idea. Vamos.
Cinemática espiando a los Guardias del Ministerio:
- Sargento del Ministerio: ¡Por el casco encastado de Balthazar!, ¿cuál es tu problema, soldado? Das más guerra que un skritt pillado con las manos en la masa.
- Guardia del Ministerio: Oh, solo estábamos hablando. ¡Todo está bien! Nunca mencioné la carta del comandante ni a los piratas.
- Sargento del Ministerio: Ponte firme y llámame "señor" si no quieres que te trasladen a las Minas de Fuertenegro.
- Guardia del Ministerio: ¡S-sí, señor! Lo siento, señor. Por favor, no se lo diga al comandante, señor.
- Sargento del Ministerio: Soldado, tienes suerte de que el comandante se haya retirado a su habitación. Más te vale hacer lo mismo, antes de que cambie de opinión sobre el traslado.
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: ¡Premio! Estos tipos no son problema para los profesionales. Son demasiado torpes.
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Parece que el comandante tiene en su habitación una carta que deberíamos ver. Lo entretendré. Tú entrarás a hurtadillas mientras él está ocupado.
Tras la cinemática:
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Mmm. He visto a unos dolyak al frente. Las estampidas siempre son divertidas.
Hablando con Tybalt antes de la estampida:
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Landon está arriba. Necesitamos una distracción. ¿Qué opinas?
- Supongo que puedo encontrar una forma de captar su atención.
Interactuando con los toros de carga de la Guardia del Ministerio:
- Asustar al ganado.
- Dejarlos tranquilos... por ahora.
Durante y después de la estampida:
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Prepárate. Esto puede ponerse feo.
- Jefe de la manada de la Guardia del Ministerio: Por los pantalones de Balthazar... ¡Eh! ¡Los toros están aterrorizados!
- Comandante del Ministerio Landon: ¡Por los seis dioses! ¿Qué está pasando aquí?
- Jefe de la manada de la Guardia del Ministerio: ¡Algo ha ahuyentado a la manada, señor! ¡Se han ido!
- Comandante del Ministerio Landon: ¡Pues corre en su busca y tráelos de vuelta, idiota!
- Comandante del Ministerio Landon: Hasta que no lleguen los suministros, requisaremos lo necesario de la aldea.
- Comandante del Ministerio Landon: Sargento, requisa todo lo que necesitemos de los aldeanos. Si debes, usa la fuerza.
- Sargento del Ministerio: Sí, señor.
Hablando con Tybalt después de la estampida:
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: ¡Ha sido genial! Ahora tenemos que rebuscar las cosas del comandante para encontrar pistas.
- ¡Ya voy!
Buscando en la habitación del comandante:
- Escritorio: Este es el escritorio del comandante Landon.
- Buscar en el escritorio.
- Hay una carta sospechosa en el escritorio. Es una nota de rescate de los piratas expoliadores... ¡han capturado a Demmi Piedramazo!
- Tengo que enseñarle esta carta a Tybalt.
- No tocar.
Al enseñarle la carta a Tybalt:
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Ah, aquí está la carta. ¡Oh, interesante! Interesante... interesante...
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Es sobre... ¡guau! ¿Qué ha sido eso?
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: ¡No me parece que sean amigables! ¡Defiéndete!
Cinemática tras derrotar a las chispas:
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Veamos: "Saludos, comandante... blablablá... Demmi Piedramazo retenida... rescate...". ¿Rescate? ¡Ah, pedruscos!
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Y quién te envía, eh... Aquí. "Cordialmente, capitana Jaine[sic] de los Expoliadores." ¡Los piratas han secuestrado a Demmi! ¡Genial! Quiero decir... Qué interesante...
- <Nombre del personaje>: Eso explica por qué Demmi no acudió a la reunión con la Orden. ¿Menciona la nota el lugar al que la han llevado?
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Claro que no, pero los Expoliadores atracan en la orilla más lejana del lago, al norte. Deberíamos investigar por allí.
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Si nos disfrazamos, seguro que podremos colarnos. Si se dan cuenta, nos haremos pasar por marineros recién llegados. Hurtaré algunas prendas de Expoliadores y nos reuniremos allí.
- <Nombre del personaje>: Espera, parece un poco arriesgado. ¿No sería mejor consultarlo con alguien antes de ir más lejos? ¿Sabe la Orden lo que piensas hacer?
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Tenemos la libertad necesaria para hacerlo. El Maestro de los Susurros confía en mi discreción. Si él confía en mí, Iniciado, tú también deberías.
Correo recibido:
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El magnífico capitán Jayne ¡Qué suerte la tuya! ¡Saludos, comandante Landon! He oído que estás buscando a la hija del ministro legado, Demmi. ¡Qué suerte tienes de que la encontrásemos nosotros antes de que sucumbiera a los peligros de la naturaleza! Desgraciadamente, claro está, llevarla hasta nuestro acogedor campamento pirata tuvo un alto precio, pero seguro que un hombre acaudalado como el ministro Caudecus podrá gastar un platino... O cincuenta. Mejor que sean cien. Quién hubiese dicho que una muchacha tan fina pudiera beber tanto ron. No me cabe duda de que tú y tu amo consideraréis razonable mi propuesta. Además, sin duda es mejor que regresar a casa con una hija muerta, ¿no te parece? —Atentamente, |
Hablando con el posadero tras leer la carta en el escritorio:
- Posadero Bagley: ¿Pero qué demonios ha sido todo ese estruendo?
Un animal ha golpeado una lámpara en el establo. Ya está todo en orden.
- Ah, eso lo explica todo. Entonces, todo claro.
- Sí.
Eso no importa, camarero. Sigue sirviendo y no hagas preguntas.
- Eh... Sí, claro. ¡Mis disculpas!
- Tengo cosas mejores que hacer.
Fuera ha habido un pequeño problema, pero ya está solucionado. Tu posada está totalmente a salvo.
- Gracias. Me había preocupado, pero me alegro de que te hayas encargado de todo.
- Todo un placer.
- Perdona, creo que alguien me llama.
Hablando con Tybalt:
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Buen trabajo, <Nombre del personaje>. Creo que estás preparado para rescatar a una dama de esos puñeteros piratas expoliadores.
- Secuestrar a Demmi Piedramazo ha sido el peor error que podían haber cometido.
- ¡Qué potencia! No sé si puedo igualar tu instinto asesino, pero me esforzaré.
- ¡Mira y aprende, Tybs!
- Los piratas son la escoria del mar. No tienen ninguna oportunidad contra nuestra destreza.
- ¿Esa confianza viene de algún tipo de bebida? ¿O de un pastel? ¿Pastel de confianza?
- A lo mejor te hago uno. Venga, hay que encontrar a esos piratas.
- Seguro que si entramos y les lanzamos una sonrisa nos darán lo que queremos. ¿Verdad?
- ¡Ja! A ver si tu sonrisa hace eso. La mía hace huir a la gente.
- ¡No seas tan duro contigo mismo, Tybalt! Qué gruñido tan bueno.
- Esa es mi misión. ¡Vamos!
Hablando con Tybalt otra vez:
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Buen trabajo, <Nombre del personaje>. Creo que estás preparado para rescatar a una dama de esos puñeteros piratas expoliadores.
- Esa es mi misión. ¡Vamos!
Notas[editar]
- Al completar este segmento de la historia, se muestra Emblema de la Orden de los Susurros en el diario de historia.
Mi historia[editar]
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