La batalla de Isla Garra
La batalla de Isla Garra
- Año
- 1325 d.É
- Argumento
- Historia personal
- Capítulo
- La batalla de Isla Garra
- Localización
- Isla Garra
(Kryta) - Nivel
- 60
- Precedido por
- En alerta roja
Actividad sospechosa
Más vale prevenir que curar - Seguido por
- El rito fantasma
Reconocimiento
Campos de muerte - API
- 282
Mapa de Isla Garra Pantalla de carga |
La batalla de Isla Garra es parte de la historia personal para los personajes de todas las razas y Órdenes. Durante esta misión estás acompañado por Trahearne y tu mentor.
Objetivos[editar]
Viaja a Isla Garra y avisa a la Guardia del León.
- Reúnete con tu mentor en Isla Garra.
- Avisa al comandante Garfa.
- Avisa al subalguacil Brakk.
- Avisa a la subalguacil Mira.
- Acaba con los resurgidos.
- Informa al comandante Garfa de los detalles de la batalla.
- Defiende el muro de las abominaciones.
- Encuentra y reanima a la subalguacil Mira.
- Reagrúpate con el comandante Garfa en el interior de las murallas.
- Hunde el Barco Muerto.
- Reagrúpate con el comandante de vigilancia Garfa.
- Enciende las balizas señalizadoras.
- Ayuda a la Guardia del León a resistir contra los resurgidos.
- Retírate al patio central.
- Reagrúpate más allá de los patios.
- Lleva a los supervivientes hasta los muelles.
Recompensas[editar]
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- Todas las profesiones
- Profesión específica
- Uno de los siguientes: Respirador de comando, Respirador de escolta, Respirador de infante
- Uno de los siguientes: Respirador de comando, Respirador de escolta, Respirador de infante
- Uno de los siguientes: Respirador de comando, Respirador de escolta, Respirador de infante
Recorrido[editar]
Envenenado es muy común en esta misión y hay muchas oleadas de resurgidos que continúan apareciendo, por lo que se recomiendan habilidades que curen condiciones y que hagan daño en área, y céntrate en acabar los objetivos en vez de distraerte matando enemigos que no hagan falta. Tu mentor, Trahearne, y más adelante la Subalguacil Mira te siguen y te ayudan a combatir. Algunos guardias del león también luchan, pero muchos mueren permanentemente y no se pueden revivir.
Primero sal del puerto para encontrarte con tu mentor, y ve hacia la fortaleza con el comandante. Avisa entonces al Subalguacil Brakk y luego a la Subalguacil Mira en la playa. Tras una breve conversa, una oleada de resurgidos atacan desde cerca del agua. Derrótalos y vuelve con el comandante. En cuanto hablas con él, aparecen abominaciones resurgidas a lo largo del muro exterior sur de la fortaleza que debes derrotar.
Luego tienes que revivir a la Subalguacil Mira en la playa. La mayoría de resurgidos a partir de este punto reaparecen en matarlos y no proporcionan ni experiencia ni botín, así que es mejor ignorarlos mientras no supongan un peligro. Está rodeada de enemigos resurgidos y probablemente haya diversas áreas dañinas encima suyo, pero dentro de lo posible céntrate en revivirla para poder pasar al siguiente objetivo, que es volver con el comandante.
El comandante te ordena destruir el barco resurgido con un trabuquete, con un solo disparo lo hundes. Para ello apunta el trabuquete con las habilidades 1 y 3, y carga el tiro manteniendo pulsada la habilidad 2. Conque está bastante lejos tienes que cargar hasta más de tres cuartas partes de la barra, aproximadamente un 93%. Tienes intentos ilimitados, pero si no lo consiguieras también es posible nadar hacia él y dañarlo con ataques normales.
Vuelve una vez más con el comandante, y cuando es herido ve a encender las balizas para avisar a Arco del León, subiendo hasta la torre indicada e interactuando con el botón. No puedes recibir daño mientras la enciendes, pero los resurgidos cercanos que no hayas matado te rodearán hasta que se acabe la cinemática.
Una vez hecho esto, vuelve al patio interior y aguanta a los resurgidos por cierto tiempo (quizás aproximadamente unos 2 minutos). Activas la siguiente cinemática cuando atacas a un resurgido a cierta distancia del túnel por el que llegaste (aproximadamente a medio camino hacia el muro exterior sur) transcurrido este tiempo.
En la siguiente cinemática, un dragón resurgido aparece destruyendo la sección del muro sur de la fortaleza, que si te acercas a él usa un ataque de un grito que provoca un Miedo prolongado. Dirígete hacia el túnel norte por el que llegaste, y se activa la cinemática con tu mentor. Entonces debes volver al barco en el puerto para escapar de Isla Garra. Hay algunos resurgidos de camino, pero no reaparecen. Puedes matarlos o ignorarlos y correr directamente hasta el barco para la cinemática final de vuelta a Arco del León.
PNJs[editar]
Aliados[editar]
- Varios
Enemigos[editar]
Objetos[editar]
Diálogo[editar]
Al llegar:
- <Mentor>: La criatura que vimos no llevaba mucho en Arco del León. Quizá quede tiempo.
- <Mentor>: Hay que encontrar al comandante guardia y convencerle para preparar la defensa.
Hablando con tu mentor:
- Maestre Sieran: Es incluso más grande de lo que me contaron. ¡Hay tantos soldados! ¡Tanta resistencia! ¿Cómo podría caer?
- Ese explorador significa que el dragón envía un ataque a gran escala. Deberíamos darnos prisa.
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Esta fortaleza es enorme. Nunca la había visto tan de cerca. Quizá... no, a quién quiero engañar. ¡Los resurgidos están preparados para este lugar!
- Los orrianos no atacarían si no estuvieran seguros de que pueden arrasar la isla. Será mejor que nos apresuremos.
- Adalid Forgal Kernsson: Construyeron este fuerte para que durase. Únicamente una invasión completa a gran escala podría penetrar estos muros.
- Y eso es exactamente lo que se acerca, como augura el explorador. Démonos prisa.
De camino a encontrar al comandante:
- Guardia del león: (olisquea) Huelo algo extraño. ¿Tú no lo hueles?
- Guardia del león: ¿Oler? No, aunque no sé por qué, pero se me ha erizado el pelo de la nuca.
- Guardia del león: Esto no me gusta. Aquí algo va mal.
- Guardia del león: El que está ahí arriba hablando con el comandante Garfa, ¿no es Trahearne? ¿Tú qué crees que quiere?
- Guardia del león: ¿Trahearne? ¿El nigromante? Pasa por aquí cada pocos meses, de camino a Orr. Ese tipo me pone los pelos de punta.
- Trahearne: He investigado mucho la situación. Los orrianos atacarán aquí, en Isla Garra.
Hablando con Trahearne:
- Trahearne: Sopla un viento ominoso desde el sur, y temo que presagie el fin de Arco del León...
- Tiene que haber una forma de convencer a Garfa para que nos crea.
- Garfa es un comandante excepcional, pero de ideas fijas. No quiere plantearse que algo pueda cambiar. Entrará en razón.
- Tengo otra pregunta.
- Espero que tengas razón.
- ¿Cómo de mal crees que están las cosas?
- Terribles. Mi investigación desvela una migración masiva de resurgidos hacia el norte. Sus barcos muertos navegan empujados por un viento antinatural.
- ¿Qué podría significar?
- No lo sé. Las nubes sobre ellos son demasiado oscuras e impenetrables como para poder apreciar la auténtica amenaza. Tendremos que depositar nuestra confianza en las armas.
- Tengo otra pregunta.
- Haremos todo lo que podamos para proteger Arco del León.
- Mantengamos la calma y hagamos lo que podamos para prepararnos.
Cinemática con el comandante Garfa:
- Si sylvari:
- <Nombre del personaje>: ¡Trahearne! Ha pasado mucho tiempo. Tú estudias Orr... ¿Has visto alguna señal de que se aproxime un ataque?
- Trahearne: ¡Valiente! Sí, la Isla Garra corre un grave peligro. Gracias a la Madre Árbol que estás aquí.
- <Nombre del personaje>: Gracias por reunirte con nosotros, comandante de vigilancia Garfa. Tenemos malas noticias.
- <Nombre del personaje>: Uno de los siervos de Zhaitan entró en la ciudad. Lo destruimos, pero parece que la criatura era un explorador de una fuerza mucho mayor. El ataque es inminente.
- Comandante de vigilancia Garfa: ¿Un qué? Es muy poco probable. No hay signos de un ataque inminente. Si se fuese a producir uno, lo sabríamos.
- Si Priorato de Durmand:
- Trahearne: Por todos los... ¿Sieran? Que la Madre Árbol vele por ti. ¿Cómo te está tratando el Priorato?
- Maestre Sieran: ¡Primogénito, es un honor volver a verte! Me alegra que estés aquí. ¡Algo terrible está a punto de pasar!
- Maestre Sieran: Trahearne, te presento a mi camarada, uno de los maestres más amables y dedicados del Priorato.
- Maestre Sieran: Maestre, este es Trahearne, el erudito más importante de Tyria en Zhaitan y Orr. Es un héroe para mí.
- Si Orden de los Susurros:
- Trahearne: ¿Tybalt Zarpazurda? ¡Eres tú, amigo! Debería haberme imaginado que tu orden sería consciente del peligro.
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: ¡Retruécanos, es Trahearne! Qué suerte que estés en la isla. ¡Convence a este tipo de que vamos en serio!
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Antes de nada, permíteme presentarte a mi camarada, una de las amistades más leales y auténticas que he tenido.
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Iluminado, este es Trahearne, uno de los sylvari primogénitos. Es el erudito más destacado de Tyria en todo lo referente a Zhaitan y Orr, además de un amigo de la Orden.
- Si Vigilia:
- Trahearne: ¿Eres tú, Forgal? ¡Un placer, viejo! ¿Sigues luchando para la Vigilia?
- Adalid Forgal Kernsson: ¿Trahearne? Por la sombra de la Pantera de las Nieves, qué alegría verte. Contigo en nuestro bando, podemos plantar cara.
- Adalid Forgal Kernsson: Quiero que conozcas a mi compañero, uno de los adalides más valerosos de mi orden.
- Adalid Forgal Kernsson: Camarada, te presento a Trahearne, un sylvari primogénito. Es el erudito más impresionante de Tyria en Zhaitan y Orr. Llevo años tratando de reclutarlo.
- Trahearne: Comandante Garfa, puedo confirmar esa información. Los sirvientes de Zhaitan se aproximan.
- Trahearne: Una flota de barcos muertos ha zarpado desde los Estrechos de la Devastación. Los resurgidos navegan bajo un manto de sigilo.
- Comandante de vigilancia Garfa: Sea lo que sea lo que has visto, no puede suponer una amenaza real. ¡La Isla Garra puede aguantar cualquier ataque!
- Comandante de vigilancia Garfa: Habla con mis comandantes, Brakk y Mira. Una vez que hayas comprobado nuestras defensas, te darás cuenta de que no hay nada que temer.
Después de la cinemática:
- Si Priorato de Durmand:
- Maestre Sieran: Querido Trahearne, ¡no te veía desde que ayudaste a la orden con aquel gorila muerto viviente!
- Trahearne: ¿El orriano ahogado al que liberasteis de su jaula? Sí, era bastante peligroso. ¿Terminó todo bien?
- Maestre Sieran: ¡Me confundí con el lenguaje de signos! Me decía "mata" y yo entendí "me siento mejor".
- Maestre Sieran: Es todo un placer volver a verte.
- Si Orden de los Susurros:
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Mírame, Trahearne... ¡Tengo una misión!
- Trahearne: ¡Por fin eres agente de campo! Enhorabuena, Tybalt. Sé lo mucho que lo deseabas.
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Deberías dejar tus libros de lado y unirte a nosotros. Se te ve algo marchito.
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Me alegro de verte, amigo mío.
- Si Vigilia:
- Adalid Forgal Kernsson: Trahearne, rata de biblioteca, dime que sabes cómo detener este ataque.
- Trahearne: Por desgracia, no. Al igual que tu amigo y tú, solo he venido a avisar a la Guardia del León.
- Adalid Forgal Kernsson: Bueno, al menos has abandonado tus escrituras y pergaminos por un día. Algo es algo.
- Adalid Forgal Kernsson: Necesitamos tu sentido común, amigo. Me alegra que estés aquí.
- Trahearne: Si no te importa, te acompañaré en tus rondas. Ha pasado mucho tiempo desde que me di una vuelta por la fortaleza.
Hablando con el Comandante de vigilancia Garfa:
- Comandante de vigilancia Garfa: Si queréis, revisad las defensas y comprobad las municiones. Te lo aseguro, estamos preparados para todo. No hay nada de qué preocuparse.
- ¿Cuál es la historia de esta isla?
- En 1237, después de que la ciudad fuese reconstruida, el comodoro Cobiah Marriner y su primer oficial, Sykox, convirtieron esta isla en un fuerte.
- ¿Por qué?
- Vieron lo que las invasiones orrianas le hicieron a Puerto Noble y a Puerto Incondicional. Alguien tenía que pararles los pies.
- ¿Y ha funcionado desde entonces?
- Por supuesto. Estas defensas son prácticamente impenetrables. No pasa nada, salvo algún tiburón muerto viviente o el zombi ocasional.
- Tengo otra pregunta.
- Pareces convencido, comandante. Espero que tengas razón.
- ¿Cuántas veces ha sido atacada esta fortaleza?
- Incontables. Hemos tenido seis ataques importantes bajo mi mando, y eso ha sido solo en los últimos cuatro años.
- ¿Contra qué tipo de criaturas habéis recibido entrenamiento?
- Cualquier clase de resurgido. Cualquier cosa orriana. Zombis, abominaciones, bestias con la piel podrida... ¡Incluso nos atrevemos con barcos muertos!
- Pero no dragones, ¿verdad?
- ¿Dragones? ¿Como Zhaitan o uno de sus campeones? No. No, no vienen a Arco del León.
- Tengo otra pregunta.
- Esperemos que siga así la cosa.
- ¿Cómo de bien conoces a Trahearne?
- Lo respeto muchísimo. A veces viene de visita cuando encontramos un nuevo tipo de resurgido. Lo estudia y nos explica cómo matarlo.
- ¿Se ha equivocado alguna vez acerca de un ataque?
- ¡Trahearne es un erudito, no un soldado! Yo no me meto en sus asuntos y él no se mete en los míos.
- Tengo otra pregunta.
- Sabe de lo que habla. Deberías escucharlo.
- Me gustaría poder compartir tu certeza, comandante.
De camino a ver a Brakk:
- Guardia del león: He oído los rumores... Muertos vivientes que llegan bajo el manto del sigilo. ¿Tú te lo crees?
- Guardia del león: Bah. No será más que otra retahíla de cadáveres. Suele pasar.
- Guardia del león: No, creo que esta vez será peor. Tengo... un muy mal presentimiento.
- Trahearne: Noto un escalofrío en el aire. Es el comienzo.
Con el Subalguacil Brakk:
- Trahearne: Permaneced alerta. Los orrianos planean un ataque a gran escala contra la Isla Garra.
- Subalguacil Brakk: Dile al comandante de vigilancia Garfa que la artillería está emplazada.
- Subalguacil Brakk: ¡La fortaleza situada aquí, en la Isla Garra, alberga más cañones de 24 libras que un navío de combate!
- Subalguacil Brakk: Ya podemos luchar contra los orrianos. No te quepa duda.
- Subalguacil Brakk: Vigila a la subalguacil Mira. Está al cargo de las patrullas playeras.
- Trahearne: La Guardia del León no lo entiende. No va a ser una misión de combate; será una masacre.
Con la Subalguacil Mira:
- Subalguacil Mira: Bienvenido a la patrulla de playas, lo más peligroso de Isla Garra.
- Trahearne: Subalguacil, se acerca un ataque masivo de Orr. Harías bien en preparar tus tropas.
- Subalguacil Mira: Si caemos, nuestra última orden es encender esas tres almenaras. Hay que avisar al Arco del León si cae la fortaleza.
- Subalguacil Mira: No se han encendido ni una sola vez en cien años. Ese es nuestro orgullo.
- Guardia del león: ¡Subalguacil Mira! ¡Haz sonar la alarma, hay muertos vivientes en la playa!
- Subalguacil Mira: Si de verdad se acerca una invasión, necesitaremos a toda la gente de la isla para mantener el frente.
Tras derrotar a los resurgidos:
- Subalguacil Mira: No se le puede llamar una lucha. Trahearne, ¿no habías dicho que sería una batalla importante?
- Trahearne: Ha sido una finta. Están probando las defensas. Habrá más dentro de poco.
- Subalguacil Mira: Tiene sentido. Informa al comandante de vigilancia Garfa y que los hombres se preparen.
De camino a ver al Comandante de vigilancia Garfa:
- Trahearne: Llevo veinticinco años estudiando a las criaturas orrianas, pero casi nunca me enfrento a ellas en combate. Es espantoso.
- Trahearne: ¿Crees que el comandante nos escuchará ahora?
- Trahearne: Toda mi vida, me he sentido atraído hacia Orr. Mi Caza Sylvestre consiste en curar la tierra.
- Trahearne: Incluso después de todas mis investigaciones, no tengo apenas ni idea de cómo derrotarlos.
Con el Comandante de vigilancia Garfa:
- Comandante de vigilancia Garfa: Un mísero ataque. Casi ni nos ha despeinado. ¿Es todo lo que tienen?
- Trahearne: Habrá más ataques. Muchos más. Seguid vigilando el mar.
- Comandante de vigilancia Garfa: Eres un erudito, no un general, primogénito. ¿Por qué hay que creerte?
Cinemática cuando empieza la invasión:
- Subalguacil Mira: ¡Están atacando la fortaleza! ¡Preparaos en el muro! ¡Se aproximan enemigos!
- Subalguacil Brakk: ¡Son demasiados! ¡Han abierto una brecha en el muro! ¡Nos están arrollan...!
- Comandante de vigilancia Garfa: ¡Están catapultando abominaciones al muro occidental! ¡Repeled a los invasores!
Hablando con tus aliados:
- Trahearne: Muchos... El viento se hace más fuerte. ¡Hay algo en las nubes!
- Tenemos que perseverar.
- Comandante de vigilancia Garfa: Hemos resistido contra situaciones peores que esta. ¡Desafío al dragón a tomar nuestra isla! ¿ME OYES, ZHAITAN? ¡TE DESAFÍO!
- Tenías que decirlo, ¿no?
Hablando con tu mentor:
- Maestre Sieran: ¡Son demasiados! ¿Qué hacemos? ¿Cómo podemos ayudar?
- Seguid luchando. ¡No abandonéis la esperanza!
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: ¡Son demasiados! ¡Es imposible aguantar! <Nombre del personaje>... ¿qué hacemos?
- ¡Eliminadlos conforme lleguen!
- Adalid Forgal Kernsson: ¡Sé inquebrantable, <Nombre del personaje>! Somos todo lo que se interpone entre esos monstruos y la gente de Arco del León.
- Lo seré. ¡Cuidado, viejo!
Tras derrotar a las abominaciones:
- Guarida del león: ¡El escuadrón de la guardia del león Mira está inmovilizado en la playa!
De vuelta con el Comandante de vigilancia Garfa:
- Comandante de vigilancia Garfa: ¡Mira! ¿Cómo van las playas?
- Subalguacil Mira: Cayendo, señor, al igual que muchos buenos soldados. Tenemos que encender las atalayas.
- Comandante de vigilancia Garfa: ¿Y permitir que Arco del León crea que hemos perdido? No, Mira, aún no. La Isla Garra ha resistido cosas peores.
- Comandante de vigilancia Garfa: Ve a un trabuquete. Sus refuerzos están en el puerto, en el Barco Muerto. ¡Hundidlo!
Cinemática hundiendo el Barco Muerto:
- Subalguacil Mira: ¡Lo logramos! ¡Se hunde! Una pequeña victoria Por los dioses, son muchísimos.
Volviendo con el Comandante de vigilancia Garfa:
- Subalguacil Mira: ¡Garfa, este ataque no es normal! ¡La Guardia del León cede! ¡Nos dominan!
- Comandante de vigilancia Garfa: Isla Garra ha resistido durante casi cien años. ¡No puede caer!
- Comandante de vigilancia Garfa: ¡Lucharemos hasta que no quede nadie! ¡Ni ninguna espada! Nunca nos rend...
Cinemática cuando le dan al Comandante de vigilancia Garfa:
- Subalguacil Mira: ¡Médico! ¡Necesitamos a un médico aquí! Comandante Garfa, aguanta. Te pondrás bien.
- Comandante de vigilancia Garfa: Silencio, Mira. Los soldados no necesitan mentiras. Retiraos a la ciudad. Dile al comodoro que... que hicimos todo lo que pudimos...
- Subalguacil Mira: Como ordenes, comandante. Te juro que... esto no ha acabado.
- <Nombre del personaje>: Mira, la isla está saturada. Tenemos que evacuar la Guardia del León y encender las atalayas para alertar a la ciudad.
- Subalguacil Mira: No. Nunca llegarás al faro con todas esas monstruosidades resurgidos persiguiéndote. Tendremos que abrirnos paso luchando.
- Subalguacil Mira: La Guardia del León mantendrá la posición en el patio mientras tú te diriges a la torre. Si los dioses quieren, los resurgidos estarán demasiado ocupados con nosotros como para detenerte.
- Trahearne: Tu valentía es digna de elogio, subalguacil Mira, pero tus soldados no pueden sobrevivir a una batalla prolongada contra tantos muertos vivientes.
- Subalguacil Mira: Es el deber de cada guardia del león entregar nuestras vidas para proteger nuestra ciudad. Si es necesario, entonces lo haremos.
- Subalguacil Mira: Nos reuniremos en el patio. Tú enciende los faros de advertencia. ¡Ve!
Después de la cinemática:
- Subalguacil Mira: ¡Retroceded todos al patio! ¡Venid conmigo para la batalla final!
- Subalguacil Mira: ¡Que retrocedan! ¡No cedáis al desaliento!
Cuando aparece la criatura:
- Maestre Sieran: ¡Todos, a cubierto! ¡Exhala corrupción!
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: ¡Cuidado! ¡El ataque de aliento de la criatura podría corromperte!
- Adalid Forgal Kernsson: ¡Por los espíritus! ¡Nunca creí que vería uno de estos! ¡Rápido, atacad!
- Subalguacil Mira: ¡Mis ojos! ¡Mis ojos! No veo... ¡Por Kormir, quema!
Cinemática reagrupándote más allá del patio:
- Si Priorato de Durmand:
- Maestre Sieran: Los siervos del dragón nunca dejarán que nuestros barcos zarpen. Si rodean los muelles, nos matarán... y las fuerzas de Zhaitan crecerán.
- <Nombre del personaje>: Nuestros soldados están malheridos, no pueden luchar. ¡Casi ni pueden caminar! No podemos organizar una defensa y seguir embarcándolos.
- Maestre Sieran: Alguien tiene que retenerlos para que los demás tengan tiempo de escapar. No, alguien no. Yo.
- <Nombre del personaje>: ¡No puedes ganar contra esos monstruos, Sieran! ¡Son demasiados!
- Maestre Sieran: Me conformo con mantenerlos ocupados. Gixx siempre decía que nadie me ganaba dando guerra.
- Maestre Sieran: Cuando tú y yo nos conocimos, solo me preocupaba por mí. Quería diversión, emociones, riesgo... Los demás daban igual.
- Maestre Sieran: Me has enseñado la lección más importante de mi corta vida. Los amigos pasarán por cualquier adversidad para ayudarse entre ellos. Por eso tengo que hacer esto.
- Maestre Sieran: Siempre me he preguntado cómo sería ir a la Niebla. Será una aventura nueva...
- Si Orden de los Susurros:
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Los siervos del dragón nunca dejarán que nuestros barcos zarpen. Si rodean los muelles, nos matarán... y las fuerzas de Zhaitan crecerán.
- <Nombre del personaje>: Nuestros soldados están malheridos, no pueden luchar. ¡Casi ni pueden caminar! No podemos organizar una defensa y seguir embarcándolos.
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Nunca he vivido valientemente, pero creo que... me gustaría morir así.
- <Nombre del personaje>: ¿Qué? Tybalt, ¿qué estás tramando?
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Cuando perdí la mano, me uní a la Orden de los Susurros porque los charr pensaban que ya no servía para nada. ¿Quién quiere a un ingeniero sin pulso?
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Dije que quería enfrentarme a dragones, y lo hice. Pero luego me pasé seis años investigando, sin afrontar mis miedos. Sin intentarlo, ni siquiera.
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: Nadie creía que tuviese valor. Ni siquiera yo... Y llegaste tú. Pusiste en mí tu confianza. Ahora necesito que confíes en mí. Puedo hacerlo.
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: ¡Adelante! No hay tiempo que perder. Confía en mí.
- Si Vigilia:
- Adalid Forgal Kernsson: Los siervos del dragón nunca dejarán que nuestros barcos zarpen. Si rodean los muelles, nos matarán... y las fuerzas de Zhaitan crecerán.
- <Nombre del personaje>: Nuestros soldados están malheridos, no pueden luchar. ¡Casi ni pueden caminar! No podemos organizar una defensa y seguir embarcándolos.
- Adalid Forgal Kernsson: Un cometido heroico pero casi imposible, con todo en contra y un enemigo implacable. Esta, camarada, es una muerte legendaria.
- Adalid Forgal Kernsson: Pon a salvo a los heridos. Alerta en Arco del León. Algún día volverás y recuperarás la isla, no me cabe duda.
- <Nombre del personaje>: ¡Forgal! ¡No puedes retenerlos solo!
- Adalid Forgal Kernsson: Los dragones me arrebataron a mi pareja y mis hijos. Pensaba que mi leyenda moriría con ellos, que no tendría quien siguiese mis pasos y contase mi historia.
- Adalid Forgal Kernsson: Ahora eso ha cambiado. Gracias por ser mi legado. Cuenta mi historia junto al calor de las hogueras, donde los escaldos cantan a los héroes.
- Adalid Forgal Kernsson: Vete. No fracasaré.
Cinemática siguiente:
- Si Priorato de Durmand:
- Maestre Sieran: Me quedaba tanto por ver...
- Maestre Sieran: No puedo dejar que les hagas daño. ¡No!
- Si Orden de los Susurros:
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: He hecho un montón de cosas mal en mi vida. Pero esta pienso hacerla bien.
- Iluminado Tybalt Zarpazurda: ¡No permitiré que os hagáis con ellos!
- Si Vigilia:
- Adalid Forgal Kernsson: Podrás ganar la batalla, dragón, pero nunca derrotarás a nuestro espíritu.
- Adalid Forgal Kernsson: Soy Forgal, hijo de Kern. ¡Mi padre fue el último chamán dolyak! ¡Soy un adalid de la Vigilia! ¡Jamás me arrodillaré ante ti!
Escapando hacia los barcos:
- Trahearne: Mira está en mal estado. Tendrás que abrirnos un camino. ¡Guardia del León! ¡Seguidme!
- Trahearne: ¡Aprisa, a los barcos! Este sacrificio no será en vano.
Curiosidades[editar]
Mi historia[editar]